El presidente electo, Javier Milei, tras su reunión con Alberto Fernández para iniciar la transición, ha designado a Guillermo Francos como uno de los principales encargados de esta tarea, señalando el rol fundamental que desempeñará en la administración del nuevo gobierno libertario.
Hace meses, Milei confirmó que Francos sería su ministro del Interior y ahora se enfocará en ordenar la transición junto a Nicolás Posse, futuro jefe de Gabinete. Su relevancia radica en sus sólidos contactos en el ámbito político, incluyendo funcionarios de la administración saliente.
Francos, exrepresentante ante el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) nombrado por Fernández en 2019, cuenta con una extensa trayectoria política que se remonta a su participación en la fundación de Acción por la República junto a Domingo Cavallo. Fue diputado nacional y presidente del Banco Provincia durante la gestión de Scioli como gobernador de Buenos Aires.
Su estrecha relación con Scioli alimenta especulaciones sobre la continuidad del embajador en Brasil en la gestión de Milei para mantener la relación con Lula da Silva. Además, se rumorea que habría sugerido a Florencio Randazzo como presidente de la Cámara de Diputados, consolidándose como una figura clave en el nuevo gobierno.
Como ministro del Interior, Francos será el enlace con gobernadores, siendo vital para la búsqueda de consensos y mayorías en un Congreso donde el oficialismo enfrenta desafíos. Randazzo y Sebastián García de Luca también emergen como actores relevantes en la construcción de alianzas y acuerdos con diversos sectores políticos.
Este esquema tentativo revela una estrategia de Milei para la etapa inicial de su gobierno, pero su configuración final se conocerá el próximo 10 de diciembre.
