Los precios del Brent se dispararon más de un 10% en las agitadas operaciones del lunes, ya que el riesgo de una prohibición del petróleo ruso por parte de Estados Unidos y Europa y los retrasos en las conversaciones con Irán desencadenaron lo que se perfila como una gran sacudida estanflacionaria para los mercados mundiales.

El euro amplió su caída y las materias primas de todo tipo subieron mientras el conflicto ruso-ucraniano no daba señales de enfriarse. Rusia califica la campaña que lanzó el 24 de febrero como una “operación militar especial” y afirma que no tiene planes de ocupar Ucrania.

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Estados Unidos y sus aliados europeos discuten la imposición de un embargo de petróleo a Rusia, una de las sanciones económicas más duras que podrían caer sobre Moscú por la invasión a Ucrania ordenada por el presidente Vladimir Putin, y que hasta ahora los socios occidentales mantuvieron en carpeta por el impacto que tendría sobre la economía global.

Apenas el secretario de Estado norteamerciano, Antony Blinken, reconoció que se analiza la posibilidad de prohibir las compras de petróleo ruso, el Brent subió 12,73 dólares, a 130,84 dólares, mientras que el crudo estado

unidense subía 9,92 dólares, a 125,60 dólares, según reportó Reuters.

El precio del petróleo

“Si Occidente corta la mayor parte de las exportaciones energéticas de Rusia, sería un gran shock para los mercados globales“, dijo el economista jefe de BofA, Ethan Harris.

Se calcula que la pérdida de los 5 millones de barriles de Rusia podría hacer que los precios del petróleo se duplicaran hasta alcanzar los 200 dólares por barril y que el crecimiento económico se redujera a nivel mundial.

Y no es sólo el petróleo, ya que los precios de las materias primas han tenido su mejor comienzo de año desde 1915, según BofA.

Entre los numerosos movimientos de la semana pasada, el níquel subió un 19%, el aluminio un 15%, el zinc un 12% y el cobre un 8%, mientras que los futuros del trigo subieron un 60% y el maíz un 15%.

Algunos países de europa comenzaron con las restricciones de compra para sus clientes, algo que no pasaría en la Argentina, al menos con el aceite, dijeron desde la cadena aceitera a BAE Negocios.

Crisis en Europa

El aumento en los precios de las materias primas, sin embargo, no hará más que aumentar el pulso de la inflación mundial, ya que se espera que los datos de los precios al consumo en EEUU de esta semana muestren un crecimiento anual estratosférico del 7,9%, y la medida básica del 6,4%. Todo ello complica el panorama político del Banco Central Europeo (BCE) cuando se reúna esta semana.

“Dado que el potencial de estanflación es muy real, es probable que el BCE mantenga la máxima flexibilidad con su programa de compra de activos en 20.000 millones de euros hasta el segundo trimestre y, potencialmente, más allá, retrasando así el calendario de subidas de tipos”, dijo Tapas Strickland, economista de NAB. “Sin embargo, las previsiones de un Índice de Precios al Consumidor (IPC) más alto significan que las subidas de tipos serán necesarias en el horizonte”.

La perspectiva a corto plazo de un BCE más moderado se combinó con los flujos de refugio para hacer que los rendimientos de los bonos alemanes a 10 años bajaran 32 puntos básicos la semana pasada, mientras que los rendimientos estadounidenses cayeron 23 puntos básicos hasta el 1,738%. Con el empeoramiento de las perspectivas de crecimiento en Europa, la moneda única se vio afectada y cayó un 3% la semana pasada, hasta alcanzar su nivel más bajo desde mediados de 2020. La última bajada fue del 0,6%, a 1,0864 dólares, y corría el riesgo de probar su mínimo de 2020 en torno a 1,0635 dólares.

El dólar se mantuvo en general firme, apoyado en parte por un sólido informe de nóminas que no hizo sinoreafirmar las expectativas del mercado de una subida de las tasas de interés de referencia por parte de la Reserva Federal este mes.

El índice del dólar se situó por última vez en 98,812 y subió un 2,3% la semana pasada.

El oro también se benefició de su condición de refugio más antiguo y subió un 0,7% a 1.983 dólares la onza.

El precio del Euro

Con el empeoramiento de las perspectivas de crecimiento en Europa, el euro se vio afectado y cayó un 3% la semana pasada, hasta alcanzar su nivel más bajo desde mediados de 2020. La última bajada fue del 0,6%, a 1,0864 dólares, y corría el riesgo de probar su mínimo de 2020 en torno a 1,0635 dólares.