Rusia ha comenzado a desplegar buques con armamento nuclear táctico en el Mar Báltico por primera vez en los últimos 30 años, según un informe anual del Servicio de Inteligencia noruego. También se ha informado de un supuesto plan para desestabilizar Moldavia, que ha cerrado su espacio aéreo en respuesta. Expertos temen una posible escalada de la guerra en Ucrania y una guerra localizada que implique a Estados Unidos, la OTAN y Noruega. La inteligencia noruega señala que las armas nucleares tácticas son una amenaza especialmente grave en varios escenarios operativos en los que pueden participar países de la OTAN.

Transnistria se declaró república el 29 de octubre de 1990, sin reconocimiento internacional, incluso de Rusia. Cubre el 12% del territorio de Moldavia, aporta el 23% de su producción industrial y controla rutas de transporte y gasoductos de importancia estratégica.

Con una población de alrededor de 500.000 habitantes, Transnistria tiene su propia moneda pero depende en gran medida de Rusia, que le suministra gas gratis y ha desplegado alrededor de 20.000 toneladas de armamento de la era soviética en la región. Rusia tiene 1.500 soldados estacionados en Transnistria, alegando que los hablantes de ruso están siendo hostigados por el gobierno de Sandu. Durante la invasión de Ucrania, los generales rusos declararon que uno de los objetivos de Rusia era conquistar todas las regiones del este y sur de habla rusa de Ucrania, hasta Transnistria, que limita con Ucrania al oeste.

Las autoridades de Transnistria y Rusia han informado de ataques con bombas contra edificios públicos, torres de transmisión de radio y depósitos de municiones del ejército ruso. A pesar de los desafíos, Transnistria sigue funcionando como un estado independiente de facto.

Agencias AFP y Reuters