Tras la devaluación de diciembre y la liberación continua de precios relativos, las perspectivas económicas en Argentina empeoraron este mes, según la encuesta del LatinFocus Consensus Forecast. La expectativa es de una mayor devaluación en 2024, acompañada por una inflación que podría alcanzar el 280% este año. A pesar de los elogios del FMI por las reformas implementadas por el presidente Javier Milei, la cautela del mercado persiste debido al riesgo político asociado a estas medidas, ya que podrían ser revertidas por el Congreso controlado por la oposición.

Los analistas aumentaron sus proyecciones de inflación para 2024, anticipando un IPC que superaría el 280% en promedio. La eliminación de los controles de precios y la reducción de la brecha entre los tipos de cambio oficial y paralelo contribuyen a esta preocupación. Además, se pronostica un fuerte salto devaluatorio antes de 2025, con proyecciones que sugieren que el dólar oficial podría llegar a los $1700,4 a fin de año.

La incertidumbre sobre las perspectivas para el peso persiste, ya que una mayor convergencia entre el mercado oficial y el paralelo no puede descartarse. La depreciación del peso parece inevitable este año, y mucho dependerá del éxito de la agenda de reformas del presidente Milei. Si los intentos de reactivar la economía, reducir el déficit fiscal y controlar la emisión de dinero son exitosos, la demanda del peso podría fortalecerse, estabilizando la moneda.