Este lunes, el presidente Javier Milei recibirá en la Quinta de Olivos a cuatro gobernadores que apoyaron sus recientes vetos, en un encuentro destinado a consolidar sus alianzas políticas. El líder libertario compartirá un asado con Gustavo Sáenz (Salta), Raúl Jalil (Catamarca), Osvaldo Jaldo (Tucumán) y Hugo Passalacqua (Misiones), todos ellos cercanos al peronismo pero alineados con la gestión nacional. La reunión se da en un momento clave, con importantes discusiones parlamentarias en curso, como el Presupuesto 2024, la Ley Hojarasca y la propuesta opositora para reformar los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU).

Milei busca reforzar el apoyo de estos mandatarios provinciales, siguiendo la misma estrategia que utilizó con los diputados que respaldaron su gobierno en el Congreso. Acompañado por su jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y posiblemente por el vicejefe Lisandro Catalán, el objetivo es afianzar el respaldo a su agenda legislativa, en particular en un contexto donde el kirchnerismo podría intentar limitar el uso de los DNU.

Entre los invitados, Raúl Jalil ha sido uno de los más cercanos a la gestión libertaria, visitando frecuentemente las oficinas de Francos en Balcarce 50. Durante su participación en el Coloquio de Idea, Jalil destacó la necesidad de unidad en el peronismo, en un contexto de elecciones internas donde se enfrentan figuras como Cristina Kirchner y Ricardo Quintela.

Osvaldo Jaldo, por su parte, se ha distanciado de su predecesor Juan Manzur, impulsando un bloque propio en la Cámara de Diputados y alineándose con Milei en la firma del Pacto de Mayo. Mientras tanto, Gustavo Sáenz, aunque proveniente del PJ, ha mantenido su distancia del kirchnerismo, formando su propia alianza política. Passalacqua, representante del Frente de la Concordia Misionero, también juega un rol clave en el equilibrio de poder en el Congreso, con cuatro diputados alineados a su liderazgo.

El encuentro se enmarca en un escenario donde Milei busca consolidar alianzas legislativas para garantizar la gobernabilidad, mientras enfrenta una oposición dura y desafíos clave, como la posible reforma de la ley de DNU que podría limitar su capacidad de acción.