El filósofo francés Éric Sadin dio una presentación en la Feria del Libro de Buenos Aires en la que llamó a cuestionar el avance indiscriminado y acelerado de la inteligencia artificial en distintas áreas de nuestras vidas. Durante más de una hora, Sadin habló sobre el impacto de la tecnología de inteligencia artificial generativa ChatGPT en la educación, el mercado laboral y el presente más urgente.
Sadin recordó al periodista argentino Eduardo Febbro, quien falleció en París en abril, y habló sobre su relación con Argentina, la editorial Caja Negra y el resto de Latinoamérica. También criticó la relación de la sociedad con la instrucción y cómo la tecnología nos vuelve caprichosos.
Además, Sadin expresó su preocupación sobre la democratización de la inteligencia artificial y llamó “criminales” a los ingenieros de Facebook que la consideran como “una nueva ilustración”. El filósofo francés instó a la sociedad a pensar más y ser más conscientes sobre los efectos que la inteligencia artificial tendrá en el futuro.
En este artículo, el filósofo y sociólogo francés Frédéric Sadin expresa su preocupación por el impacto de los avances tecnológicos en la existencia humana. Sadin cree que la aceleración del cambio tecnológico, especialmente con los recientes anuncios del metaverso y la aparición de ChatGPT, está redefiniendo la relación entre la tecnología y los seres humanos.
Sadin argumenta que la tecnología ya no es una herramienta que organiza las acciones humanas, sino que tiene el potencial de hacerse cargo de nuestras facultades humanas fundamentales, como el lenguaje y la representación de imágenes. Este cambio en la relación entre la tecnología y los humanos tiene profundas consecuencias antropológicas que redefinen la naturaleza misma de ser humano.
Sadin desestima la reciente llamada a una pausa en el desarrollo de la inteligencia artificial hecha por figuras como Elon Musk y Yuval Harari, describiendo a Harari como un historiador prehistórico y a Musk como esquizofrénico. Él cree que el mundo está experimentando un cambio en el estatus de la tecnología, que ahora tiene la capacidad no solo de recopilar y manipular datos, sino también de procesarlos y evaluarlos, influyendo en lo que percibimos como verdad y en lo que decidimos hacer.
La solución de Sadin a esta situación es movilizar a la sociedad para oponerse al control del lenguaje por parte de ciertos ingenieros desconectados de la realidad. Llama a los maestros, científicos, políticos y estudiantes a participar en una discusión crítica sobre los riesgos asociados con ceder el control del lenguaje a la tecnología.
En general, el mensaje de Sadin es una advertencia sobre los peligros del desarrollo desenfrenado de la tecnología y una llamada a un enfoque más responsable hacia la innovación tecnológica.