Tras los anuncios de recortes de gastos hechos por el presidente de Diputados, Martín Menem, desde el Senado afirman que la vicepresidenta, Victoria Villarruel, está a la espera de los resultados de una auditoría para determinar las acciones a tomar. Se anticipa una gestión austera.

La nueva secretaria administrativa del Senado, María Laura Izzo, asumió su cargo el miércoles y está encabezando las labores de auditoría. El equipo ha logrado acceder a todos los detalles del sistema y está descubriendo algunas sorpresas, aunque se reservan los detalles hasta tener toda la información completa. La auditoría se espera que sea profunda y tomará varios días más antes de que Villarruel se reúna con Javier Milei para discutir y luego debatir las medidas con los senadores.

En medio de la construcción política liderada por la vicepresidenta en el Senado, que logró su primer éxito la semana pasada al designar autoridades y retener el control de las comisiones, se evita imponer decisiones de manera autoritaria. Se busca trabajar conjuntamente en las decisiones importantes, según lo expresado por allegados a su círculo.

Las auditorías son un proceso común en nuevas administraciones. En 2020, Cristina Kirchner denunció a su predecesora, Gabriela Michetti, tras una revisión del manejo del Senado.

En Diputados, Martín Menem comunicó a través de redes sociales las medidas adoptadas en consonancia con el Poder Ejecutivo. Anunció la finalización de la pauta publicitaria y la revisión de los recursos utilizados en los viajes de legisladores al extranjero.

El anuncio incluyó la intención de reducir la estructura organizativa. Asimismo, la organización del Senado está en pleno cambio, con varios senadores nuevos que aún no disponen de despacho.

A pesar de la renovación, es la primera vez que una tercera fuerza domina el Senado, lo que ha generado ajustes en la distribución de espacios y despachos entre las diferentes bancadas.