A la par de la reducción en los índices de inflación experimentada en los últimos meses, la actividad económica también mostró una notable contracción. La combinación de menor poder adquisitivo por parte de los consumidores y una disminución en la demanda agregada resultó en una fuerte caída de las ventas. Los informes difundidos este jueves por el Indec reflejan este fenómeno con cifras concretas: en marzo, las ventas en los supermercados cayeron un 9,3% interanual; en los autoservicios mayoristas, un 10,7%; y en los shoppings, un 11,3%. Estos números se comparan con el mismo mes de 2023.
En el acumulado del primer trimestre, las bajas fueron de 11,5% en los supermercados y de 8,5% en los mayoristas, siempre en relación al período enero-marzo del año anterior. En los supermercados, en particular, el ticket promedio de compra fue de $17.536. En proporción, las operaciones con tarjetas de débito (302,3%) y crédito (340,1%) crecieron mucho más en términos nominales que las realizadas en efectivo (172,2%). Además, se multiplicaron por seis las transacciones hechas con otros medios de pago, como QR y billeteras virtuales.
Encuesta: Qué opinan los supermercadistas sobre las perspectivas para los próximos meses
El informe sobre supermercados incluyó una encuesta cualitativa en la que los dueños y encargados de estos negocios compartieron sus perspectivas para el futuro inmediato. Para el trimestre mayo-julio de 2024, apenas el 8,5% consideró que las ventas de sus empresas mejorarán; el 22% sostuvo que empeorarán, y el 69,5% opinó que permanecerán sin cambios.