El excanciller brasileño Celso Amorim se encuentra en Kiev como enviado del presidente Lula da Silva y ha sido recibido por el diplomático ucraniano Andrij Melnik, quien ha expresado su confianza en que Brasil pueda desempeñar un papel importante para detener la agresión rusa y alcanzar una justa y duradera paz en la región. Amorim se reunirá con el presidente Volodimir Zelenski para presentar el plan de paz de Brasil y recibirá las demandas y exigencias del presidente ucraniano para que el Gobierno brasileño pueda idear un plan de actuación que permita comenzar negociaciones entre las dos partes.
El viaje de Amorim a Kiev busca aminorar los cuestionamientos que ha recibido el Gobierno brasileño por los aliados occidentales de Ucrania y que consideran que son guiños a Rusia. Amorim visitó Moscú en abril, donde se reunió con el presidente Vladimir Putin, como parte del plan del Gobierno de Lula de hacer de Brasil un intermediario en este conflicto en el marco de una solución que no pase por seguir armando a Ucrania.
Lula da Silva ha expresado su confianza en que Amorim regrese con “buenas noticias” tras su reunión con Zelenski en Kiev, y ha afirmado que Brasil y otros países tienen razones para mantenerse en una posición de equilibrio en este conflicto. Lula también ha señalado que confía en que Amorim traerá soluciones para que puedan comenzar a hablar sobre paz y que podrían tener instrumentos para hablar con otros países y construir, quién sabe, la posibilidad de parar esta guerra.
