Trump nombra al antivacunas Robert F. Kennedy Jr. responsable de Salud Pública

El presidente electo, Donald Trump, designó a Kennedy como candidato para el cargo de secretario de Sanidad en el periodo previo a su victoria electoral, aunque altos cargos de su campaña descartaron que Kennedy fuera a tener verdaderamente un papel oficial.

Donald Trump ha elegido al que fuera su contrincante como candidato presidencial independiente y escéptico de las vacunas Robert F. Kennedy ,Jr. para dirigir el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, mientras sigue formando su nuevo Gobierno.

El nombramiento, que aún debe ser aprobado por el Senado, significaría que Kennedy podría dirigir una enorme agencia que supervisa áreas que van desde los medicamentos, la seguridad alimentaria, la investigación médica hasta los programas de bienestar.

Trump critica a la industria alimentaria y las compañías farmaceúticas

Kennedy procede de una dinastía política que a veces han comparado en EE.UU. con la realeza en Europa: hijo del candidato asesinado en 1968, RobertF. Kennedy y sobrino del presidente, también asesinado John F. Kennedy en 1963.

Añadió que Kennedy haría a los Estados Unidos “grandes y saludables de nuevo”, en referencia a su lema de campaña.

Un recorrido contradictorio y desconcertante

Durante años fue un exitoso abogado medioambientalista, creo una asociación para proteger de vertidos y contaminación a los ríos y se enfrentó a grandes empresas como Monsanto. También combatió a la industria petrolera durante el Gobierno de George Bush al que acusaba de tener intereses entremezclados incompatibles con su cargo público en su libro Crímenes contra la naturaleza.

En las dos últimas décadas, ha dedicado cada vez más tiempo a promover sus opiniones sobre las vacunas, haciéndose cargo de la organización antivacunas sin ánimo de lucro Children’s Health Defence, que cobró fuerza durante la pandemia.

Kennedy cuestiona que el VIH provoque el sida y sugiere que los antidepresivos provocan tiroteos en las escuelas

Kennedy insiste en que no es antivacunas y nunca ha dicho al público que evite las vacunas, sin embargo ha dejado clara su oposición en repetidas ocasiones, contradiciendo previamente el consenso científico al decir que “no hay ninguna vacuna que sea segura y eficaz”.

Revisión de la sanidad pública estadounidense

La familia Kennedy ha roto relaciones públicamente tras sus opiniones sin fundamento científico. Si llegara al cargo, ha prometido una transformación de la agencia sanitaria estadounidense, que incluiría la sustitución de 600 empleados que supervisan la investigación sobre vacunas y, en general, impedir que los empleados, que suelen ser investigadores y científicos, abandonen la agencia para trabajar para la industria farmacéutica en la típica puerta giratoria.

Kennedy ha dicho que quiere reorientar la atención de la sanidad pública de las enfermedades infecciosas a los problemas que, según él, conforman la “epidemia de enfermedades crónicas“, como la obesidad, la diabetes, el autismo y las enfermedades mentales, de las que culpa a las empresas y a los productores de alimentos por utilizar pesticidas nocivos.

No a los anuncios de medicamentos en televisión

Su nombramiento suscitará la oposición de los miembros del grupo de presión farmacéutico en Washington, ya que ha propuesto cambios radicales, como la prohibición de que los fabricantes de medicamentos se anuncien en televisión.

En un post publicado en la red X el mes pasado, Kennedy prometió poner fin a la “agresiva supresión” de terapias como la psicodelia y las células madre por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos estadounidense.

Kennedy se presentó como candidato independiente contra Trump antes de ceder y apoyar ahora presidente electo, quien le prometió un papel en la política sanitaria de su próximo Gobierno.

Sorpresa, más que asombro, condenas y aplausos

Altos cargos de la campaña de Trump habían dicho que Kennedy no tendría una participación oficial en el Gobierno, pero que influiría en los programas de vacunación. Su nombramiento ha causado reacciones encontradas entre republicanos y demócratas por igual, con algunos expertos y funcionarios de salud pública condenando la medida.

Robert F. Kennedy, Jr. no está ni remotamente cualificado para el cargo y no debería estar cerca de las agencias científicas que salvaguardan nuestra nutrición, seguridad alimentaria y salud

Peter Lurie

Presidente del Centro para la Ciencia en el Interés Público

Jared Polis, el gobernador demócrata de Colorado, dijo que estaba “entusiasmado” con el nombramiento de Kennedy, añadiendo que sacudiría la Administración de Alimentos y Medicamentos. Trump había promocionado repetidamente a Kennedy en mítines durante su campaña electoral, diciendo que le dejaría “ir a lo loco” en materia de salud si llegaba al cargo.

Fuente: EuroNews

Tags

Compartir post