En un contexto de fuertes tensiones entre el Gobierno, el PRO y una crisis interna con la vicepresidenta Victoria Villarruel, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, asumió un rol clave en la búsqueda de consensos. Este miércoles, Francos desembarca en el Senado con el objetivo de avanzar en las negociaciones para habilitar el debate sobre la eliminación de las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO).

Reunión clave en el Senado

A partir de las 15 horas, Francos se reunirá con los jefes de bloques aliados en la Cámara alta. En un gesto político relevante, convocó a la vicepresidenta y titular del Senado, Victoria Villarruel, para incluirla en las conversaciones y fortalecer las posibilidades de acuerdo.

El oficialismo enfrenta un desafío importante: a pesar de que el presidente Javier Milei habilitó las sesiones extraordinarias hace varios días, la falta de consenso político ha impedido avances en la agenda legislativa.

Para agilizar el proceso, Francos decidió adelantar este encuentro, originalmente previsto para la próxima semana, e incorporar a Villarruel junto con líderes del PRO, la UCR y aliados de La Libertad Avanza (LLA). Esta maniobra marca un cambio en la estrategia gubernamental, que hasta ahora había excluido a la vicepresidenta de las negociaciones clave.

Crisis interna con Victoria Villarruel

La relación entre el Gobierno y Villarruel se encuentra en un punto crítico. La vicepresidenta ha cuestionado públicamente los altos salarios legislativos en contraste con su bajo ingreso, generando tensiones dentro de la coalición oficialista.

Además, la falta de acuerdos con Karina Milei y Santiago Caputo, figuras centrales en la estrategia política del Ejecutivo, ha profundizado el malestar interno. Las diferencias sobre la prioridad de los temas a tratar en el Parlamento han generado fricciones que dificultan la unidad dentro del Gobierno.

Un acercamiento estratégico

Con el presidente Milei y su círculo cercano en Suiza, Francos aprovechó la oportunidad para acercar posiciones con Villarruel. Este movimiento busca no solo contener las tensiones internas, sino también sumar apoyo en el Parlamento en un momento crítico para el oficialismo.

El deterioro de la relación con el PRO y la caída del acuerdo electoral con el macrismo complican el panorama político a meses de las elecciones legislativas. La falta de respaldo en el Congreso pone en riesgo la capacidad del Gobierno para impulsar su agenda, incluido el proyecto de eliminación de las PASO, una de las principales prioridades del Ejecutivo.

El contexto político y los desafíos

El oficialismo enfrenta un escenario complejo, con divisiones internas que debilitan su posición frente a una oposición fortalecida. La inclusión de Villarruel en las negociaciones podría ser clave para destrabar el debate y reconfigurar las alianzas necesarias para avanzar en el Congreso.

Sin embargo, el camino hacia un acuerdo está lleno de obstáculos. Las diferencias ideológicas y estratégicas dentro de la coalición oficialista, sumadas a la falta de confianza entre los actores políticos, dificultan la construcción de un consenso sólido.

El desenlace de estas negociaciones será determinante no solo para el futuro de las PASO, sino también para la estabilidad política del Gobierno en un año decisivo para el panorama electoral argentino.