A solo nueve días de las elecciones, el resultado en la capital de la provincia de Buenos Aires aún no se ha definido por completo. El intendente Julio Garro, del PRO, ha solicitado a la Justicia Electoral que se abran 69 urnas.

El equipo de Garro afirma que se han detectado irregularidades en esas actas durante el escrutinio de votos de los nativos del lunes. Mientras tanto, desde el búnker de Julio Alak, el candidato del peronismo, se ha mantenido el silencio.

Este pedido de Garro llega en un momento de tensión y confusión. Ayer, Alberto Fernández, Axel Kicillof y Wado de Pedro felicitaron a Alak por su aparente triunfo. Sin embargo, los plazos para presentar impugnaciones seguían abiertos y el proceso formal continuaba su curso.

Los mensajes en Twitter del Presidente, el Gobernador y el Ministro del Interior llamaron la atención en La Plata. “A 40 años de democracia, es extraño que proclamen a un ganador cuando el proceso formal aún no ha concluido”, afirman en la capital provincial.

Garro alega estar por delante por 747 votos, mientras que Alak sostiene que la diferencia está a su favor, con unos 897 votos.

Los números difieren significativamente entre ambas fuerzas políticas. Según el escrutinio de las mesas de votantes nativos, Alak habría obtenido 151,279 votos frente a los 156,975 de Juntos por el Cambio, lo que supondría una ventaja de 5,696 votos a favor de Garro. Sin embargo, en el peronismo discrepan y afirman que la diferencia es de 4,100 votos.

Los plazos para solicitar la apertura de urnas vencieron el martes a las 18:00. Ahora, la Junta Electoral Nacional de la provincia de Buenos Aires deberá decidir si acepta o no la petición de Garro.

Esta Junta está compuesta por Alejo Ramos Padilla, titular del Juzgado Federal Nº 1 con competencia electoral; Roberto Lemos Arias, presidente de la Cámara Federal de Apelaciones; y Sergio Torres, presidente de la Suprema Corte bonaerense. Ellos serán los encargados de decidir si se abren las urnas solicitadas por Garro para volver a contar los votos.

Garro explicó: “En una elección tan ajustada, estamos pidiendo 69 urnas de un total de 1,806 porque hubo errores en la pantalla oficial, mesas que no tienen votos en blanco y mesas con cambios de tendencias. Nuestra voluntad es conocer el resultado real de la elección”.

Además, Garro señaló que aún faltan cargar 40 urnas, que se encuentran entre las 69 que ha solicitado abrir. “Lo que le estamos pidiendo al juez es que abra las urnas, porque estamos convencidos de que ahí se encuentra la definición de la elección”, afirmó el intendente.

Por su parte, Julio Alak se declaró ganador tras el conteo definitivo tanto de votantes nativos como extranjeros. “Soy el intendente electo. Mis colaboradores afirman que el escrutinio de votantes nativos y extranjeros nos da una ventaja cercana a los 800 votos”, declaró el Ministro de Justicia de la provincia.