Mientras el staff del Fondo Monetario Internacional (FMI) exige a la Argentina en el acuerdo por la refinanciación del Stand-by que dejó el macrismo que “se desaliente el uso de criptomonedas”, en los Estados Unidos (principal accionista del organismo) se anunció esta semana la intención de lanzar un dólar digital. La medida de la administración Biden es en respuesta a la iniciativa de China, que controla el tráfico de cripto-activos, pero también avanza en la creación de sus propias variantes de moneda digital. La pelea es por ver quién inunda el mercado, y así controla, el mercado de activos digitales.
En el caso argentino, los controles sobre los cripto-activos comenzaron hace ya dos años, pero todavía no había una prohibición total. Desde la Organización Bitcoin solicitaron al Ejecutivo mayores precisiones esta semana sobre lo acordado con el Fondo.
Esta semana, tras varios días de alta volatilidad, el bitcoin (la criptomoneda más conocida) si disparó hasta un 20 por ciento luego que el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, firmara un decreto en el que delinea la estrategia del gobierno para la regulación de bitcoin. En simultáneo, anunció la iniciativa de crear su propia moneda digital. El decreto ordena a las agencias federales del país que evalúen los riesgos y oportunidades que representan las criptomonedas para la seguridad nacional de Estados Unidos y su impacto en la economía.
La decisión se toma en medio de las restricciones financieras que se aplicaron a Rusia, y desde ese país a otros naciones occidentales, en medio de la guerra en Ucrania. Por su naturaleza, los cripto-activos, que escapan a los controles de gobiernos y bancos centrales, cobraron relevancia en los movimientos financieros. Esto llevó incluso a China a volver sobre sus pasos y aplicar un doble estándar de control. Por un lado, prohíbe su uso y desalienta la fabricación de semiconductores para computadoras que hacen minería de este tipo de activos; mientras que, por el otro, busca lanzar variantes propias de cripto-activos.
En septiembre de 2021, los organismos estatales chinos declararon conjuntamente ilegales todas las transacciones de criptomonedas y asumieron el compromiso de eliminar la minería de criptodivisas. El gigante asiático tiene una alta supervisión reguladora central de los flujos de capital dentro de la economía. En tanto, la moneda digital del banco central chino, el Yuan digital o e-CNY, se lanzó en febrero pasado internacionalmente durante los Juegos Olímpicos de Invierno que se desarrollaron en Beijing y desde entonces el país se ha convertido en el líder de las iniciativas de criptomonedas de los bancos centrales en el mundo.
Esta semana Estados Unidos contraatacó con la iniciativa de crear su dólar digital. El decreto de Biden, el primero que se enfoca exclusivamente en el creciente sector de los activos digitales, ordena a las agencias federales que coordinen su trabajo en el sector de las criptomonedas. La secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, también dejó trascender información de que Biden adoptaría un enfoque constructivo para las regulaciones, lo que provocó una disparada en las criptomonedas. En este marco, Estados Unidos dará comienzo a los trabajos de creación de un dólar digital, como parte de un importante esfuerzo de regulación en el campo de las criptomonedas, según informó la Casa Blanca esta semana.
En Argentina crece el uso
El acuerdo con el FMI establece en sus anexos técnicos que “se debe desalentar el uso de criptomonedas con miras a prevenir el lavado de dinero, la informalidad y la desintermediación”. Esto ya venía sucediendo previo al acuerdo, pero ahora se pone como objetivo en el marco del programa de facilidades extendidas al que se comprometerá el país para refinanciar los 45.000 millones de dólares del Stand-by.
De acuerdo con un informe de Bloomberg, a los trabajadores se les paga cada vez más en criptomonedas para eludir los controles de cambio y protegerlos de las fluctuaciones monetarias y la inflación. Argentina tiene una mayor proporción de empleados a los que se les paga en criptomonedas en el mundo y esto guarda relación con la ley local que permite a las empresas pagar hasta el 20 por ciento de la remuneración en especie.
Desde el Banco Central y la Comisión Nacional de Valores (CNV) advirtieron que los ahorros en criptomonedas son vulnerables a ataques cibernéticos y no están protegidos por un seguro de depósito. “Los cripto-activos presentan riesgos y desafíos para sus usuarios, inversores y para el sistema financiero en su conjunto”, detalla el documento conjunto del Banco Central y la CNV.
Los cripto-activos pueden definirse como una representación digital de valor o de derechos que se transfieren y almacenan electrónicamente mediante la Tecnología de Registro Distribuido (Distributed Ledger Technology, DLT) u otra tecnología similar. Si bien estas tecnologías podrían contribuir a promover una mayor eficiencia e innovación financiera, los cripto-activos no son dinero de curso legal, señaló el Central. “El valor de los cripto-activos depende de su grado de aceptación, por lo que puede verse afectado por la ocurrencia de eventos adversos a nivel global”, agrega.
Las criptomonedas también sufren disrupciones y ciberataques. Esto implica que no hay salvaguardas. El crimen relacionado con las criptomonedas a nivel global rondó los 14.000 millones de dólares el año pasado. Estas acciones ilícitas implicaron un crecimiento de 82 por ciento respecto de los 7800 millones de dólares involucrados en 2020, ante el avance global de las criptomonedas. En los últimos diez años hubo más de 200 ataques efectivos de gran escala a cripto-billeteras y a ‘exchanges’, lo que permitió el robo de más de 31 billones de dólares. En promedio, cada ataque tuvo un costo mayor a los 30 millones de dólares. Binance, Coinbase y plataformas más pequeñas fueron los blancos elegidos.
En cuanto a las condiciones impuestas por el Fondo a la Argentina, la organización no gubernamental (ONG) Bitcoin Argentina solicitó al gobierno que le permita el acceso a la información pública relacionada con el reciente acuerdo. La solicitud fue dirigida directamente al despacho del ministro de Economía, Martín Guzmán, en una carta enviada el miércoles pasado.
Fuente: El Destape, Argentina