Sam Altman es el protagonista de algunos de los cambios más importantes que ha vivido la industria de la IA en los últimos años, pero el hombre detrás de ChatGPT asegura que lo mejor aún está por llegar.
El CEO de OpenAI no quiere apostarlo todo a ChatGPT, quiere que la presencia de la inteligencia artificial sea más física. Altman ha expresado que es el momento de los robots humanoides, muy pronto podrían estar entre nosotros.
De la IA a los robots humanoides domésticos en los hogares
La llegada de la IA ha sido una revolución, pero los verdaderos cambios se producirán cuando los robots humanoides lleguen a miles de hogares. Esto no será sencillo, los costes siguen siendo demasiado elevados para las compañías.
Las empresas trabajan en robots humanoides al estilo de Optimus de Tesla o Figure 02 de Figure AI. Ambos operan en las fábricas de la empresa de Elon Musk y BMW respectivamente, pero las compañías buscan democratizar esta tecnología para que llegue a todos los hogares.
“No creo que el mundo haya vivido aún el auge de los robots humanoides. Y no creo que esté muy lejos de ser una experiencia visceral», en declaraciones de Sam Altman con la periodista Emily Chang para Bloomberg News.
El creador de ChatGPT opina que las películas de ciencia ficción no están tan lejos de la realidad, las máquinas llegarán a los hogares antes de lo esperado. Los robots humanoides se van a encargar de tareas que antes estaban destinadas a millones de empleados.
Los robots van a convivir con los humanos
Los robots llegarán primero a las empresas, pero unos años después empezarán a convivir con los humanos en tareas tan cotidianas como comprar en un supermercado. “El primer día que vayas caminando por la calle y haya siete robots pasando a tu lado haciendo cosas o lo que sea, se va a sentir como ciencia ficción”, según el CEO de OpenAI.
El hombre detrás del chatbot más utilizado del mundo no ha dudado en asegurar que no estamos preparados para los cambios que se producirán en los próximos años. Sam Altman opina que el mundo no es realmente consciente de todo lo que está avanzando la inteligencia artificial.
La clave del uso generalizado de los robots humanoides domésticos estará en el precio. Los modelos podrían llegar a costar unos 1.500 dólares antes de que termine esta década, un precio muy similar a los 1.200 euros del iPhone 16 Pro Max en España.