Elon Musk reveló mediante un comunicado oficial que, aproximadamente dentro de seis meses, podríamos ser testigos de los primeros humanos que poseerán un implante cerebral electrónico, de la empresa neurotecnológica fundada y liderada por el magnate norteamericano, la empresa Neuralink.
Este chip ya se probó en animales de experimentación, tales como cerdos y monos, lo que permitió observar las demostraciones de cómo un mono es capaz de jugar al Pong, un videojuego básico, controlándolo a través de su cerebro, así como también escribiendo en una computadora de forma telepática. Sí, tal cual como lo leíste: escribir sin utilizar el teclado, únicamente con la mente.
Aunque muchos podrían creer que esto no se trata más que de ficción, la realidad es que los últimos avances hechos en materia científica y tecnológica están a otro nivel. En ese sentido, Neuralink demostró que su implante cerebral es auténtico y funcional, ya que permite controlar dispositivos con solo el pensamiento.
A continuación, vamos a ver todos y cada uno de los detalles respecto a su funcionamiento:
¿Qué es y cómo funciona el implante Link?
Link en sí, consiste en un implante cerebral de tamaño milimétrico, el cual consiste en miles de finos y flexibles hilos, también, a escala micrométrica, los cuales contienen muchísimos electrodos. Éstos se instalan en el cerebro, a modo de que cada hilo se pueda conectar directamente a las áreas cerebrales que controlan el movimiento, lo que representa algo así como si fuera una pequeña expansión de las propias redes neuronales naturales.
Una vez que se instaló en el cerebro, el implante se debe conectar mediante Bluetooth al móvil, ordenador, mouse o teclado, para así poder controlarlos directamente con solo pensarlo. De esta manera, esto permitiría realizar actividades como enviar mensajes o navegar en internet de forma telepática.
¿Cuál es el objetivo del desarrollo de Link?
Link se presenta así mismo como un dispositivo médico, cuyo objetivo principal es el de poder ayudar a las personas que posean alguna clase de parálisis (como tetraplejia), lo que les hace perder la capacidad de mover todo el cuerpo o una parte del mismo, así como también provoca la pérdida de la comunicación. El objetivo de Link es ayudar a recuperar, dentro de lo posible, la independencia del paciente a través del control de computadoras o celulares de forma telepática, únicamente con su cerebro.
Y esto no es todo. A diferencia de otros implantes cerebrales, que actualmente están aprobados para su uso médico, Link al ser un interfaz cerebro-computadora, es capaz de poder transmitir información hacia y desde el cerebro.
De esta manera, se calcula que en el futuro Link no pueda ser solo capaz de ayudar a las personas con parálisis, sino que pueda también aplicarse propiamente para restaurar la función motora y/o sensorial de la persona, así como también poder tratar una amplia gama de trastornos neurológicos, en los cuales las redes neuronales puedan estar alteradas.
Hasta ahora Link se probó en ensayos preclínicos en animales, pero ya se anunció que las pruebas en humanos van a comenzar a mediados del 2023, lo que implicaría ya un gran paso para esta innovadora tecnología.
Fuente: Ambito Financiero. Argentina.
