l próximo sábado, en un acto que promete marcar un hito en la relación entre el Gobierno y el sector agropecuario, Javier Milei aprovechará la inauguración oficial de la Exposición Rural de Palermo para lanzar un paquete de medidas que, según fuentes oficiales, incluirá una rebaja permanente de retenciones. El Presidente ingresará de manera triunfal a la pista central acompañado por su hermana Karina Milei, secretaria general de la Presidencia, y el ministro de Economía, Luis Caputo, en una puesta en escena cuidadosamente diseñada para enviar un mensaje de poder y cercanía con el campo.
“Se vienen anuncios importantes”, confirmó una fuente cercana al Ejecutivo, sin dar detalles, aunque precisó que se tratará de “medidas permanentes y no transitorias”, un reclamo sostenido de la Mesa de Enlace. El Gobierno planea informar la eliminación total de las retenciones al novillo, hoy del 6,75%, y, aunque no se especificaron otros productos, fuentes oficiales sugieren que habrá más sorpresas: “No se queden cortos”, deslizaron.
Un escenario cargado de simbolismo
El acto, que tendrá lugar en el predio ferial de Palermo, será también un espectáculo cuidadosamente calculado. Milei entrará en auto por la avenida Sarmiento, rompiendo con la sobriedad tradicional de los presidentes argentinos en este tipo de ceremonias. La escena evoca imágenes de Carlos Menem, quien en los años ’90 ingresaba a la pista central con su secretario de Agricultura, Felipe Solá, en demostraciones de acercamiento al sector.
En la historia reciente, ni Néstor ni Cristina Kirchner asistieron a los actos inaugurales, y Mauricio Macri optaba por entradas discretas por la calle Juncal. Alberto Fernández, en sus últimos dos años de mandato, ni siquiera participó de la muestra. El contraste con el estilo mediático y confrontativo de Milei es evidente: busca que el acto funcione como un mensaje político y económico directo al corazón del agro.
El reclamo del campo y la respuesta del Gobierno
El sector agropecuario lleva años exigiendo una reducción estructural de retenciones, al considerar que son una “carga confiscatoria” que desalienta la inversión y castiga la producción. Según datos oficiales, en 2024 las principales cadenas de granos aportaron US$5350 millones en concepto de derechos de exportación.
En enero, el Gobierno había aplicado una reducción temporal: la soja pasó de 33% a 26%, el maíz y el trigo de 12% a 9,5%, y el girasol de 7% a 5,5%. Sin embargo, tras el vencimiento de la medida, muchos productos volvieron a sus alícuotas originales, salvo el trigo y la cebada, que mantendrán un 9,5% hasta marzo de 2026.
El anuncio del sábado apunta a dar previsibilidad y responder al pedido de la Mesa de Enlace: que cualquier rebaja sea permanente y avance hacia la eliminación total. Según cálculos privados, eliminar las retenciones a la carne vacuna implicaría un costo fiscal de US$186 millones, pero el Gobierno lo considera un incentivo clave para aumentar la producción y la competitividad.
Rumores y expectativas: más que retenciones
En las últimas horas circularon versiones sobre la posible emisión de un bono fiscal para devolver parcialmente las retenciones, un esquema similar a los Bopreal, pero fuentes del Gobierno calificaron la idea de “cualquiera” y la descartaron. También se habló de un mini RIGI (Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones) con beneficios en Ganancias y reducción de cargas sociales para nuevos empleos, aunque no hay confirmación oficial.
En 2023, Milei ya había anunciado en la Rural el fin de las retenciones para la carne de vaca, la leche y la carne porcina, junto a promesas de cambios en el manejo contable del ganado y un régimen de amortización acelerada para toros de alto valor genético, medidas que aún no se implementaron.
Un acto político con múltiples lecturas
La decisión de que Luis Caputo acompañe a Milei en el auto tiene una fuerte carga simbólica: el ministro de Economía será co-protagonista del anuncio, mostrando que el ajuste fiscal y la desregulación no están reñidos con gestos hacia la producción.
El Gobierno busca, además, marcar diferencias con el kirchnerismo en el principal bastión opositor: la Tercera Sección Electoral bonaerense, donde el agro tiene un peso significativo. La imagen del Presidente, con su hermana y su ministro estrella, en medio de un público que históricamente fue refractario a los gobiernos populistas, busca consolidar su alianza con uno de los sectores más productivos del país.