El nuevo plan económico del gobierno de Javier Milei —que entró en vigencia este lunes con la implementación de un régimen cambiario renovado y un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI)— recibió elogios desde el exterior, aunque también vinieron acompañados de advertencias respecto a la fragilidad política del mandatario y el contexto global.
Estrategia audaz, pero con riesgos
El semanario británico The Economist calificó la estrategia del presidente argentino como “audaz, pero arriesgada”. En un análisis reciente, destacó que Milei «nunca estuvo tan cerca de convertir a Argentina en una economía normal», aunque advirtió que tanto el caos económico global como la tensión política interna podrían poner en jaque sus reformas.
La publicación subrayó que el escenario internacional actual no juega a favor del país. En particular, remarcó que la guerra comercial impulsada por Donald Trump provocó una caída en los precios del petróleo y amenaza los precios de los productos agrícolas, dos pilares clave de las exportaciones argentinas. Esto, indicaron, complica la acumulación de reservas, un objetivo central del nuevo esquema.
Incertidumbre electoral y fragilidad política
The Economist también hizo foco en la debilidad política del oficialismo. Si bien Milei mantiene un 45% de aprobación, el medio señaló que esa cifra ha bajado desde comienzos del año y que los próximos comicios —tanto regionales como legislativos— podrían marcar el inicio de un eventual regreso del peronismo.
Además, resaltaron que el presidente cuenta con pocos aliados estables: su vínculo más sólido parece ser con el partido del expresidente Mauricio Macri, aunque incluso allí hay diferencias que podrían facilitar avances opositores, sobre todo en distritos clave como la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires.
JPMorgan: “Superó nuestras expectativas”
Desde el ámbito financiero, el banco estadounidense JPMorgan celebró el enfoque de Milei, destacando que prioriza la consistencia macroeconómica por encima de la conveniencia política. “Los anuncios del viernes pasado no solo se ajustaron a ese principio, sino que superaron nuestras expectativas optimistas sobre la evolución macro-financiera del país”, afirmaron.
La entidad remarcó que la flexibilización de restricciones sobre personas, pagos de dividendos y deuda intraempresa es una señal positiva, y sostuvo que el nuevo marco sienta las bases para que Argentina recupere el acceso a los mercados internacionales una vez que el contexto global sea más favorable.
Además, JPMorgan ve posible que el país consolide una tendencia desinflacionaria a mediano y largo plazo, siempre y cuando se mantenga el rumbo actual.