Los huracanes no solo impactan las costas de Estados Unidos; también tienen un lugar asegurado en la política norteamericana. La temporada de ciclones y tormentas tropicales, que comienza en junio y finaliza en noviembre, a menudo coincide con las campañas electorales para el Congreso o la presidencia, alterando no solo vidas, sino también resultados políticos.
Katrina, María y Sandy: Tormentas y Contextos Políticos Diferentes
Dos de los huracanes más devastadores del último siglo, Katrina en 2005 y María en 2017, afectaron significativamente a George W. Bush y Donald Trump, respectivamente, aunque lo hicieron en años no electorales, lo que permitió que sus presidencias no sufrieran las repercusiones directas en las urnas. Katrina arrasó con Nueva Orleans, y María devastó Puerto Rico, pero ambos presidentes evitaron un impacto político inmediato.
Sin embargo, el huracán Sandy, que golpeó la costa atlántica una semana antes de las elecciones de 2012, desafió la reelección de Barack Obama. Aunque causó estragos en Nueva York y Nueva Jersey, estados demócratas, el esfuerzo de la administración Obama para manejar la crisis ayudó a mitigar las consecuencias políticas, lo que le permitió retener esos estados clave.
El Huracán Helene y la Campaña 2024: Un Nuevo Actor Político
En 2024, el huracán Helene emerge como un factor potencialmente decisivo en una de las campañas más ajustadas de la historia reciente. Mientras estados clave como Carolina del Norte y Georgia, ambos en juego, sufren devastaciones tras su paso, el ciclón podría inclinar el voto hacia Donald Trump o Kamala Harris. Trump ha aprovechado la oportunidad para criticar la respuesta del gobierno de Biden, mientras Harris utiliza la catástrofe para subrayar la urgencia del cambio climático.
El impacto de Helene aún no está claro en los sondeos, pero su influencia podría decidir la elección en estados clave como Michigan, Wisconsin, Pensilvania, Georgia y Arizona, donde la competencia es feroz. Incluso una ligera variación en el número de votos podría determinar quién ocupará la Casa Blanca.
El Cinturón del Óxido y el Cinturón del Sol: Campos de Batalla Electorales
El camino a la presidencia depende de la capacidad de cada candidato para ganar en estados claves. Para Harris, retener los estados del Cinturón del Óxido, que alguna vez fueron el centro industrial del país, es esencial. Aunque su liderazgo en Michigan y Wisconsin se ha debilitado en las últimas semanas, Pensilvania parece ser su baluarte más fuerte.
Por otro lado, Trump lidera en los estados del Cinturón del Sol, como Arizona, Georgia y Carolina del Norte, pero esos tres no son suficientes para asegurarle los 270 votos electorales necesarios. El exmandatario necesitará expandir su ventaja a otros estados si quiere regresar a la Casa Blanca.
El Tiempo es Clave: Tres Semanas que Definirán el Futuro
Con las elecciones a solo tres semanas, cada pequeño cambio en los sondeos cuenta. Ambos candidatos enfrentan obstáculos para atraer votantes decisivos: Harris lucha por ganar a los jóvenes y minorías, mientras que Trump busca recuperar a los votantes moderados que podrían haber sido repelidos por su agresiva retórica.
En una campaña ya marcada por desastres naturales, sorpresas políticas y ataques personales, cualquier cambio puede redefinir el rumbo de las elecciones. En 2024, las tormentas no solo están en el clima; están en el centro de la política norteamericana.
