La decisión de Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta de competir en las elecciones primarias (PASO) con candidatos propios en la provincia de Buenos Aires ha generado preocupación entre varios intendentes del PRO y la estructura del radicalismo en la provincia. Ven esta estrategia como una amenaza a su territorio y un conflicto significativo a la hora de discutir las listas para acceder a la Legislatura provincial.

Con la confirmación de que Néstor Grindetti y Diego Santilli se enfrentarán en las PASO por la candidatura a gobernador, varios intendentes del PRO y del radicalismo siguen levantando la voz en busca de revertir esta situación y lograr la unidad en la provincia.

La decisión de Larreta de no compartir con Patricia Bullrich la candidatura de Diego Santilli implica que habrá dos listas en las ocho secciones electorales de la provincia, lo que debilita la influencia de los intendentes en la elaboración de las listas. “La interpretación que hace Horacio con respecto a Santilli no considera la importancia del cierre de los territorios. Lo que los intendentes necesitan es aliviar esa situación, porque no solo se trata del cierre de la provincia, sino también del cierre de la sección”, analiza un estratega del PRO.

Ante la posibilidad de avanzar con el esquema de la “V” (disputa de dos candidatos en todos los niveles, excepto a nivel local), en un distrito PRO que ya muestra su cercanía a Bullrich, surge la pregunta: “¿En qué lista seccional deberíamos estar? ¿En la de Patricia o en la de Horacio? No hay ‘V’ ahí, eso es una ‘I’ latina”, comenta otro dirigente del PRO con aspiraciones a un escaño legislativo. Esta disyuntiva ya ha llevado a algunos intendentes a sumarse al bullrichismo, a pesar de haber estado alineados previamente con Larreta. Esta semana sucedió con Héctor Gay de Bahía Blanca y su vecino Mariano Uset de Punta Alta, quienes, al adelantar su decisión a LPO, también dejaron un mensaje que refleja el detonante del reposicionamiento de la cúpula del PRO en el sur bonaerense: “Me gustaría que vayamos con un candidato único, surgido de un consenso en el territorio, porque a veces en las negociaciones siempre quedan muchas cosas sin resolver”.

Previamente, en la Cuarta sección (noroeste provincial), las principales referencias del PRO, como los intendentes Pablo Petrecca (Junín) y Mariano Barroso (Nueve de Julio), también habían solicitado tener un candidato único para la gobernación. En la Quinta sección, el clamor más fuerte por un candidato único en la provincia provino de Mar del Plata. “Llegar a las elecciones en la provincia con dos candidatos del PRO no es una buena idea, es dar ventaja en el momento y lugar menos indicados”, afirmó el concejal amarillo Guillermo Volponi.

En línea con estas opiniones, Emiliano Giri, presidente del PRO marplatense, también manifestó: “¿Y si Kicillof adelanta las elecciones? ¿Y si preguntamos a los intendentes, concejales, dirigentes y precandidatos de la provincia.