El gigante bancario UBS acordó comprar a su problemático rival Credit Suisse por casi 3250 millones de dólares en un acuerdo orquestado por los reguladores para evitar nuevas turbulencias en el sistema bancario mundial. Como resultado, las acciones de Credit Suisse se desplomaron un 60,5% en las primeras operaciones del lunes, mientras que las acciones de UBS también bajaron un 8% en la bolsa de valores suiza.

Las autoridades suizas instaron a UBS a hacerse cargo de su rival más pequeño después de que un plan para que Credit Suisse tomara prestado hasta 50.000 millones de francos (54.000 millones de dólares) no logró tranquilizar a los inversores y clientes del banco. La quiebra de dos bancos en EE.UU. generó dudas sobre otras instituciones financieras globales potencialmente débiles, lo que provocó que los mercados bursátiles mundiales se hundieran y el índice principal de Hong Kong cayera más del 3%.

Credit Suisse se encuentra entre las 30 instituciones financieras conocidas como bancos de importancia sistémica a nivel mundial, y las autoridades estaban preocupadas por las consecuencias en caso de quiebra. “Un colapso descontrolado de Credit Suisse tendría consecuencias incalculables para el país y el sistema financiero internacional”, dijo el presidente de Suiza, Alain Berset, al anunciar el acuerdo el domingo por la noche.

Los problemas actuales de Credit Suisse son únicos y diferentes a las debilidades que provocaron la caída de otros bancos. Ha enfrentado una variedad de problemas en los últimos años, incluidas malas apuestas en los fondos de cobertura, reorganizaciones repetidas de su alta gerencia y un escándalo de espionaje que involucra a UBS. Esos problemas resurgieron la semana pasada después de que informó que los gerentes habían identificado “debilidades materiales” en sus controles internos sobre informes financieros.

Como parte del acuerdo, se eliminarán aproximadamente 16.000 millones de francos (17.300 millones de dólares) en bonos de Credit Suisse, lo que ha generado preocupación sobre el mercado de esos bonos y de otros bancos que los tienen. La combinación de los dos bancos suizos más grandes y conocidos, cada uno con pasados históricos que datan de mediados del siglo XIX, es un hecho inesperado para la reputación de Suiza como centro financiero mundial, lo que la pone en la cúspide de tener un único campeón bancario nacional.

En resumen, el acuerdo de UBS para comprar Credit Suisse se llevó a cabo como medida preventiva para evitar más turbulencias en el sistema bancario mundial. La combinación de los dos bancos suizos más grandes y conocidos podría afectar el mercado de bonos y poner en la cúspide a Suiza como centro financiero mundial con un único campeón bancario nacional.