La vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, ofreció una Clase Magistral en La Plata con motivo del vigésimo aniversario del triunfo electoral de Néstor Kirchner, y allí brindó diversas definiciones económicas tanto a corto como a largo plazo. En su discurso, Fernández de Kirchner habló sobre la dolarización, la convertibilidad, el acuerdo con el FMI, la matriz productiva, la corrida cambiaria, la energía, el crecimiento, la deuda y el déficit fiscal, así como el panorama internacional.
En cuanto a la dolarización, la vicepresidenta criticó el plan electoral de Javier Milei de dolarizar la economía, asegurando que se trató de un fracaso que tuvo graves consecuencias en la sociedad argentina. También hizo referencia a la convertibilidad, explicando que se inició con el Plan Bonex y terminó con la captura de todos los depósitos durante el corralito en 2001.
Respecto al acuerdo con el FMI, Fernández de Kirchner destacó que se trata de una política enlatada que se aplica como una receta monotemática a todos los países, por lo que llamó a revisar las cláusulas. Aclaró que se deben pagar las deudas con el Fondo, pero abogó por que se revisen las condicionalidades del acuerdo y se establezca un porcentaje al superávit comercial para los pagos futuros.
En cuanto a la matriz productiva, la vicepresidenta destacó que Argentina es un país industrial y energético, y que la inflación no se detiene en países como Ecuador que han dolarizado su economía. También se refirió a la corrida cambiaria y al rol del Banco Central en la administración del mercado de cambio, y explicó que el anterior ministro tuvo discusiones con respecto a esa situación.
En cuanto al crecimiento económico, Fernández de Kirchner destacó que existe un crecimiento real y genuino, pero con mala distribución del ingreso. Añadió que hoy hay trabajadores en relación de dependencia que son pobres, algo que nunca había sucedido en Argentina. También destacó que el empleo generado es precario e informal, y que el crecimiento económico es capturado por unos pocos.
En cuanto a la deuda, la vicepresidenta aseguró que se podría haber evitado el pago de miles de millones de dólares en deuda de empresas privadas si no se hubiera permitido la fuga de capitales. Respecto al déficit fiscal, Fernández de Kirchner se quejó de los que tienen dinero y no pagan impuestos, y destacó que el gasto tributario debería estar en el Presupuesto de la Nación.
Por último, la vicepresidenta habló sobre el panorama internacional y la necesidad de que los procesos de producción sean conducidos de manera responsable, para no dañar el medioambiente y fomentar la igualdad. En su opinión, la gran discusión no será sobre el capitalismo sí o no, sino sobre quién conducirá estos procesos.