En septiembre pasado, se produjeron varias explosiones en los gasoductos que transportaban gas de Rusia a Europa por el Mar Báltico.
Desde entonces no se ha aclarado la causa de las explosiones, que dejaron fuera de servicio a los dos gasoductos Nord Stream.
Pero ahora un nuevo documental indica que barcos rusos, capaces de realizar operaciones submarinas, fueron detectados en el sitio donde se registraron las explosiones.
Según el documental, las embarcaciones fueron ubicadas utilizando comunicaciones interceptadas de la marina rusa.
Cuando ocurrieron las explosiones, algunos en Occidente apuntaron a Rusia. Moscú, por su parte, culpó a los países occidentales.
Más recientemente, surgieron informes de inteligencia que responsabilizaban a operativos pro-ucranianos, aunque no apuntaban al propio gobierno de Ucrania.
Todavía se están llevando a cabo investigaciones formales en los países cercanos al lugar de la explosión.
Hasta ahora, estas naciones solo han dicho que creen que las explosiones fueron el resultado de un sabotaje y no de algún tipo de accidente.
Más recientemente, surgieron informes de inteligencia que responsabilizaban a operativos pro-ucranianos, aunque no apuntaban al propio gobierno de Ucrania.
Todavía se están llevando a cabo investigaciones formales en los países cercanos al lugar de la explosión.
Hasta ahora, estas naciones solo han dicho que creen que las explosiones fueron el resultado de un sabotaje y no de algún tipo de accidente.
Pero el último programa de una serie documental de televisión “Putin’s Shadow War” (La guerra en la sombra de Putin) y el podcast en inglés que la acompaña “Cold Front” (Frente Frío) ofrece una posible pista que apunta hacia la participación de Rusia.
La serie de las emisoras DR de Dinamarca, NRK de Noruega, SVT de Suecia y Yle de Finlandia reveló el mes pasado que los barcos rusos parecían estar mapeando parques eólicos en el Mar del Norte, incluso frente a la costa del Reino Unido.
“Barcos fantasma”
Ahora, el último episodio de la serie se centra en lo que dicen son movimientos sospechosos de barcos en el período previo a las explosiones de los gasoductos.
Se cree que los barcos incluyen el buque de investigación naval ruso Sibiryakov, el remolcador SB-123 y un tercer barco de la flota naval rusa que los medios de comunicación no han podido identificar por su nombre.
Estos eran los llamados “barcos fantasmas”, que tenían sus transmisores apagados.
Sin embargo, las emisoras dicen que pudieron rastrear sus movimientos, utilizando comunicaciones de radio interceptadas que los barcos enviaron a las bases navales rusas entre junio y septiembre de 2022.
Los movimientos fueron rastreados por un ex oficial de inteligencia naval británico, que trabajó en la interceptación de la flota báltica rusa hasta que se retiró en 2018.
Esta persona, que en el documental permanece en el anonimato, dice que usó información y comunicaciones por radio de código abierto para llevar a cabo su investigacion
Se dice que estos barcos estuvieron en las proximidades de uno de los sitios de explosión durante varias horas y, en un caso, durante casi un día completo.
Se considera que uno de los barcos, el Sibiryakov, es capaz de realizar tareas de vigilancia y mapeo submarinos, así como de lanzar un pequeño vehículo submarino.
El ex oficial de inteligencia naval británico dice que la embarcación tomó una ruta de navegación inusual en junio, alrededor del lugar donde más tarde explotaría el gasoducto, y cambió su patrón de comunicaciones a un receptor secreto.
Otro buque sin nombre también estuvo presente en esa área la semana anterior en junio.
Y se dice que un tercer barco, el remolcador naval SB-123, llegó solo cinco días antes de las explosiones de septiembre.
La comunicación por radio sugiere que permaneció allí durante toda la tarde y la noche antes de navegar de regreso a Rusia.
Imágenes satelitales
Se dice que las imágenes satelitales examinadas por las emisoras respaldan las afirmaciones sobre las rutas inusuales, y otros informes en Alemania señalan que el barco estuvo en el área el 21 y 22 de septiembre.
Esta embarcación puede ser utilizada para apoyo y rescate de submarinos y tiene capacidad para realizar operaciones en el fondo marino, según expertos entrevistados por las emisoras.
La semana pasada se supo que el ejército danés había tomado 26 fotografías de otro buque de la armada rusa que se especializa en operaciones submarinas cerca del lugar de las explosiones.
Un periódico danés dijo que el barco de rescate submarino SS-750 fue fotografiado cuatro días antes de las explosiones cercanas. Ese barco puede transportar un mini submarino.
El documental no dice que haya pruebas concluyentes de lo que estaban haciendo los barcos o que Rusia estaba detrás de la explosión. Pero plantea dudas sobre la naturaleza inusual de la actividad.
Rusia ha negado repetidamente cualquier participación en las explosiones.