Según un informe del Centro Ra de la Facultad de Ciencias Económicas, los índices de inflación en los alimentos en marzo y abril promediaron un 9,5% mensual, lo que podría significar un aumento del 197% anual. En marzo, la inflación alcanzó un 7,7%, la suba más alta desde abril de 2002, y en términos interanuales, llegó al 104,3%. Esto se mantuvo por segundo mes consecutivo en los tres dígitos, lo que no sucedía desde octubre de 1991, después de la hiperinflación.
El Indice de Precios al Consumidor de abril será publicado este viernes por el Indec, pero se espera que se ubique por encima del 7%, según distintas consultoras. Además, de acuerdo con el IPC de CABA (7,8%), los alimentos volverían a ser uno de los rubros de mayor incidencia en el nivel general, ya que aumentaron un 10,4%. Esto sustentaría la peligrosa proyección de la UBA.
Según los datos de alta frecuencia de Luciano Cohan de Alphacast, la semana pasada tuvo la segunda inflación semanal más alta desde la crisis de 2002, con un aumento del 3,5% en 7 días. Además, la canasta básica alimentaria aumentó un 120,1% anual y la canasta básica total creció un 113,2%, ambos por encima de la inflación. En marzo, para no caer en la indigencia, se necesitaban $28.388, mientras que para no ser pobre, $61.866. Para una familia tipo de cuatro integrantes, las líneas de indigencia y pobreza fueron de alrededor de $88.000 y $191.000, respectivamente.
En términos anuales, los productos incluidos en la medición de la canasta básica alimentaria presentaron aumentos fuertes en marzo, como el azúcar (198,2%), el aceite (186%), los fideos (152,9%), los huevos (152,8%), la cerveza (146,9%) y el vino (133,2%). Hubo aumentos en línea con la inflación general en lácteos, gaseosas, galletitas, fiambres y embutidos, y carnes blancas. Los precios de la carne fueron los que más atrasados quedaron, ya que se incrementaron un 87% anual, frente a un nivel general superior al 100%. Dentro de la categoría de frutas y verduras, los mayores aumentos se registraron en el kilo de naranjas (422,2%), el kilo de batata (374.1%), la papa (267.2%), la lechuga (239.1%) y el zapallo (213,5%). La manteca, el queso y la yerba mate aumentaron por debajo de la inflación.
