En la cuenta regresiva para las elecciones presidenciales, los candidatos del oficialismo, Sergio Massa, y de La Libertad Avanza, Javier Milei, aparecen como protagonistas de una nueva “grieta” que empieza a formarse en el electorado, según una nueva encuesta. Esto podría afectar a Patricia Bullrich y a todo Juntos por el Cambio, que ya se encuentra en estado de ebullición debido a la tensión entre la UCR y el ex presidente Mauricio Macri. Sin embargo, la misma encuesta también revela que los tres candidatos con más posibilidades de llegar a la Presidencia enfrentan un desafío común que parece difícil de resolver si esta “grieta” se consolida aún más: el alto rechazo a los aumentos de tarifas y, por lo tanto, a la reducción de los subsidios que todos tienen en su agenda.

Este trabajo fue realizado por el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG), mediante encuestas presenciales con 2.509 casos efectivos entre el 1 y el 20 de septiembre, en 30 localidades de 18 provincias. Los resultados no solo son cruciales para las elecciones de octubre y un posible balotaje en noviembre, sino también para el período posterior, cuando Milei, Massa o Bullrich asuman el Gobierno.

La encuesta muestra que Milei encabeza la intención de voto para octubre, seguido de cerca por Massa, mientras que Bullrich se encuentra en tercer lugar, a 4 puntos de distancia del ministro-candidato. Además de reflejar esta polarización, la encuesta revela cómo la irrupción de Milei en la escena política está cambiando la identificación política del electorado y, por ende, el panorama político en el que se encuentran los dirigentes.

En los resultados de la encuesta se destaca el impacto del “fenómeno Milei” en el electorado, la solidez del “kirchnerismo” como identidad política y el desplazamiento de Juntos por el Cambio, la coalición que originalmente se formó como un frente “anti kirchnerista”.

La posibilidad de una nueva “grieta” entre los “libertarios/liberales” y el “kirchnerismo” está afectando la estrategia de los candidatos. Milei y Massa buscan entrar en el balotaje juntos, suponiendo que podrían capturar votos de otros espacios, incluyendo algunos de Juntos por el Cambio. Bullrich, por su parte, se aferra al discurso “anti K” para tratar de recuperar un lugar que Milei le está arrebatando.

El crecimiento de la identificación de una parte del electorado como “libertaria” en contraposición con el “kirchnerismo” agrega complejidad al panorama político y podría dificultar la gobernabilidad futura. Todos los candidatos tienen en su agenda el achicamiento del déficit, lo que incluye la reducción de los subsidios a las tarifas, una medida que enfrenta un alto rechazo por parte de la población. Si este rechazo persiste, el próximo gobierno podría enfrentar problemas para implementar esta medida, lo que complicaría aún más la situación económica.

La encuesta también revela la percepción de la influencia del FMI en la política económica y cómo esta presión podría tener un efecto limitado en el futuro. Además, se destacan las debilidades de los candidatos desde la perspectiva de los votantes, como la “estabilidad emocional” en el caso de Milei y preocupaciones sobre la economía en el caso de Massa y Bullrich.

En resumen, los tres principales candidatos enfrentan un panorama político y social en constante cambio, con una creciente polarización y desafíos económicos significativos, lo que genera incertidumbre sobre el futuro gobierno y su capacidad para lidiar con la presión del FMI y la economía en un contexto de alta inflación y rechazo social a los recortes de subsidios.