En un encuentro significativo, el líder norcoreano Kim Jong-un se reunió este jueves (27/07/23) con el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, y una comitiva china en Pyongyang para conmemorar los 70 años del armisticio de la guerra de Corea. Además de celebrar este hito histórico, la reunión tuvo como objetivo fortalecer los lazos regionales entre las naciones y abordar temas de interés mutuo, especialmente en el ámbito de la seguridad y la defensa nacional.
El evento marca el primer encuentro de Kim Jong-un con un alto representante extranjero desde el inicio de la pandemia, lo que refleja su importancia y relevancia en el escenario internacional. Según la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte (KCNA), ambas partes destacaron la historia de profunda amistad entre Corea del Norte y Rusia, y expresaron su compromiso de desarrollar aún más sus relaciones estratégicas y tradicionales.
La conmemoración no estuvo exenta de tensiones, ya que se llevó a cabo un gran desfile militar durante el día, en el que el régimen norcoreano exhibió sus últimos avances armamentísticos. Este despliegue incluyó el Hwasong-18, un misil intercontinental con ojiva nuclear que ha sido definido por Kim Jong-un como “el arma más fuerte para castigar a los imperialistas estadounidenses”. Esto se suma a varias pruebas previas del poderoso proyectil hacia los mares de Japón.
La presencia de representantes de China y Rusia en el desfile militar se interpretó como una señal de respaldo a la modernización atómica de Corea del Norte. China, Corea del Norte y Rusia han mostrado su descontento con la presencia de Estados Unidos en la región del Indo-Pacífico, lo que ha contribuido a estrechar sus lazos en busca de salvaguardar la “paz y seguridad” en la zona.
Sin embargo, este acercamiento entre los países también ha generado preocupación en la comunidad internacional, especialmente en Estados Unidos. Según informes, Washington atribuye la visita de Rusia a Corea del Norte a la crisis armamentística en Ucrania, lo que ha aumentado la inquietud en un contexto de crecientes tensiones y conflictos.
El encuentro entre Kim Jong-un, representantes chinos y el ministro de Defensa ruso marca un hito en las relaciones internacionales de la región, y sus repercusiones serán seguidas de cerca por la comunidad internacional ante el panorama geopolítico actual.