Javier Milei, presidente de Argentina, anunció que en diciembre se eliminará de forma definitiva el Impuesto PAIS, calificado por él como “nefasto”. Esta medida se produce después de que este lunes se redujera el arancel de 17,5% a 7,5%, en lo que Milei describió como un paso importante hacia la reducción de la carga impositiva.
Durante su discurso en el acto de la Unión Industrial Argentina, realizado en el Día de la Industria el 2 de septiembre, Milei criticó duramente la dependencia de la industria nacional de los subsidios y exenciones otorgados por el Estado en los últimos años. Según el mandatario, este proceso de dependencia comenzó a mediados del siglo pasado, cuando se decidió que todo debía producirse en el país, lo que llevó a “robarle al campo” para proteger la industria.
Milei pintó un sombrío panorama de la economía argentina, comparándola con un monstruo de múltiples cabezas, siendo una de las principales la elevada carga impositiva. Resaltó que en muchas ocasiones se han creado impuestos que se suponían transitorios, pero que nunca se eliminaron. Sin embargo, destacó que su administración está marcando un hito histórico al reducir efectivamente este arancel.
Al anunciar el fin del Impuesto PAIS, Milei explicó que la reducción de costos en productos importados beneficiará a una amplia gama de insumos productivos. En este sentido, criticó la política de sustitución de importaciones, argumentando que “el 80% de las importaciones son insumos productivos”, y que esta política ha contribuido a convertir a Argentina en un “infierno tributario”.
En su extenso discurso, Milei también arremetió contra lo que denominó como “mitos empleados por la política” para intervenir en el sector industrial. Advirtió que aquellos que prometen potenciar la industria mientras continúan imprimiendo dinero y manipulando el tipo de cambio son “estafadores”. En contraposición, defendió la importancia de una buena política fiscal y monetaria, el respeto a las deudas, la lucha contra la inflación y la recuperación de la estabilidad económica.
Aunque agradeció al sector industrial por su apoyo al proyecto de país del gobierno y su resiliencia ante las dificultades económicas, Milei también lanzó una fuerte crítica a los empresarios, afirmando que durante décadas han disfrutado de subsidios y exenciones que les han permitido “cazar en el zoológico”. En línea con esto, citó al expresidente Carlos Menem, señalando que el cambio económico que propone requerirá que los empresarios aprendan a “andar en bicicleta sin rueditas” y abandonen ideas económicas perjudiciales.
Finalmente, Milei reafirmó su compromiso con la apertura económica, pero subrayó que esto solo ocurrirá cuando estén dadas las condiciones estructurales necesarias. Prometió un “boom industrial genuino” y se definió como un “aliado” del sector privado.