El Gobierno de Israel ha declarado el estado de guerra después de un masivo ataque sorpresa llevado a cabo por el grupo Hamas. En una operación sin precedentes, Hamas logró infiltrar desde Gaza a decenas de terroristas palestinos en varias ciudades del sur de Israel, desencadenando duros enfrentamientos armados.

Los enfrentamientos y los ataques con cohetes han cobrado hasta el momento más de 200 vidas en Israel, según los servicios de emergencia, aunque no se ha especificado cuántos de ellos eran civiles o militares. Además, se reportaron más de 1,100 heridos. En respuesta, Israel lanzó una amplia movilización de reservistas y declaró un estado de guerra.

El ataque palestino, denominado “Tormenta de Al Aqsa”, comenzó alrededor de las 6:30 horas locales y se mantuvo en curso hasta el mediodía. Durante este tiempo, al menos sesenta milicianos permanecieron en al menos 14 puntos diferentes de Israel.

El comandante de las Brigadas Al Qasam, el brazo armado de Hamas, confirmó que la ofensiva incluyó el lanzamiento de más de 5,000 cohetes desde Gaza hacia territorio israelí, así como la infiltración de decenas de milicianos en Israel. Hamas también afirmó haber secuestrado los cuerpos de varios soldados israelíes y tener cautivos a civiles israelíes capturados durante su incursión por tierra.

La inteligencia israelí quedó sorprendida por este ataque múltiple, que incluyó infiltraciones por tierra, mar y aire desde Gaza, tras el lanzamiento de cientos de cohetes desde el enclave palestino. La operación causó conmoción y caos en Israel, recordando la dolorosa memoria de la Guerra de Yom Kipur de 1973, cuando Israel fue atacado sorpresivamente en el día más sagrado del calendario judío.

Los enfrentamientos continúan mientras las redes sociales se llenan de videos de combatientes de Hamas y multitudes palestinas enfurecidas. Hezbolá, el movimiento libanés proiraní, felicitó a Hamas por su “operación heroica a gran escala” contra Israel.

La situación en Israel es de emergencia, y la comunidad internacional sigue de cerca estos acontecimientos, buscando una solución pacífica para esta escalada de violencia en la región.