El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se pronuncia en contra del respaldo a los candidatos presidenciales del balotaje, Javier Milei y Sergio Massa, lo que lo enfrenta a Patricia Bullrich y Mauricio Macri, quienes han expresado su apoyo a Milei argumentando la necesidad de evitar un nuevo ciclo kirchnerista liderado por Massa.

Esta postura se presenta después de un acuerdo entre Milei, Macri y Bullrich, que se mantendrá hasta el balotaje y posiblemente más allá si el candidato libertario logra cambiar el resultado electoral. En contraste con las figuras principales de Juntos por el Cambio, Rodríguez Larreta enfatiza la importancia de mantener la unidad en el partido para fortalecer la coalición en el próximo gobierno.

Rodríguez Larreta critica tanto a Massa como a Milei, considerando al primero como una continuación del populismo kirchnerista y al segundo como un nuevo populismo y un “salto al vacío”. Esta posición se alinea con la de Elisa Carrió y la Unión Cívica Radical (UCR), que también optan por la “neutralidad” en el balotaje, argumentando que ninguno de los dos candidatos garantiza un futuro de progreso para Argentina.

Esta postura también es respaldada por los 10 gobernadores de Juntos por el Cambio, quienes evitan definirse en el balotaje para preservar su relación con el próximo gobierno. María Eugenia Vidal se suma a este sector al promover la idea de que los ciudadanos son libres de decidir su voto y que ningún político, incluyéndola, debe influir en esa elección.

En cuanto a las elecciones generales, Larreta reconoce la necesidad de aprender de la pérdida de votantes y advierte que las dos opciones en el balotaje son perjudiciales para Argentina, anticipando más desafíos y dificultades en el futuro.