Parece que el “veranito cambiario” de Javier Milei llegó a su fin, con el dólar entrando en una nueva fase alcista. Este miércoles, los financieros superaron la barrera de los $1.200, un hecho que no se registraba desde fines de enero, y el paralelo rompió un nuevo récord nominal.
El dólar blue cerró la jornada a $1.245 para la compra y $1.275 para la venta, después de alcanzar, durante la jornada, los $1.280. Así, avanzó más de $160 en los últimos siete días, superando su anterior máximo histórico registrado el 24 de enero. Con este escenario y considerando el tipo de cambio informal, el peso argentino nunca estuvo tan devaluado como hasta este 22 de mayo. La brecha con el oficial se ubica en 37,2%, el nivel más alto desde principios de febrero y el doble del que tenía hace solo tres semanas. La diferencia con el MEP es del 4,46%, mientras que en comparación con el Contado con Liquidación alcanza el 2,34%.
El Banco Central resolvió reducir la tasa de política monetaria al 40%, siendo esta la sexta rebaja desde la asunción de La Libertad Avanza, influyendo en la tendencia alcista del paralelo. Esto también refleja el creciente nerviosismo en el mercado ante la incertidumbre en torno al debate de la Ley Bases en el Senado, mientras desde el Gobierno se insiste en la importancia de aprobar reformas estructurales en medio de la recesión económica.
El salto del dólar coincidió con un incremento del Riesgo País. El EMBI, elaborado por JP Morgan, registró un incremento del 6,2% en un día, situándose en 1.378 puntos básicos. Paralelamente, los bonos soberanos en dólares sufrieron caídas significativas, de hasta el 7,5%, como es el caso del Global 2045.
En la bolsa porteña, el S&P Merval retrocedió 0,2%, ubicándose en 1.578.435,30 unidades. Las acciones de empresas que cotizan en Wall Street sufrieron importantes retrocesos, especialmente en los bancos locales. El Banco Supervielle encabezó las bajas con una caída del 7,8%, seguido por Grupo Financiero Galicia (-6,6%), Banco Macro (-5,9%) y Banco BBVA (-4,7%).
El Gobierno descartó intervenir en el mercado para frenar el salto en el dólar. El vocero presidencial Manuel Adorni relativizó el alza, asegurando que la percepción del aumento “depende del periodo de tiempo que se analice” y descartó que estas subas impacten en los precios de los productos, argumentando que no deberían generar más inflación.
“El dólar es un precio más de la economía. No tiene absolutamente nada que ver con el impacto en precios”, reforzó Adorni.