El Banco Central ha intensificado sus compras en el mercado mayorista, impulsado por un aumento en la entrada de dólares de los exportadores. Esta situación ha beneficiado la evolución de los activos bursátiles, especialmente la deuda en dólares.

Los bonos argentinos en dólares experimentaron un incremento notable este jueves, con un promedio de alza del 2,9% para los Globales del canje en Wall Street y del 1,8% para los Bonares en promedio. Tanto los bonos Globales con ley extranjera como los Bonares con ley local han mostrado un crecimiento firme en 2024, con alzas promedio del 30%. Además, el riesgo país ha descendido a 1.359 puntos básicos, su nivel más bajo desde noviembre de 2020.

En el mercado secundario, los títulos públicos más líquidos han alcanzado precios máximos desde su cotización inicial en septiembre de 2020, superando los USD 50. Los analistas consideran que aún mantienen un margen considerable para seguir ascendiendo.

A pesar de la baja de los principales índices accionarios en Wall Street, el índice S&P Merval de la Bolsa porteña también registró una pérdida en pesos del 2,4% al cierre. No obstante, el dólar “contado con liquidación” moderó su baja en moneda dura al 1,3%.

Por otro lado, se espera el anuncio inminente de la venta de la operatoria local del banco HSBC al Grupo Galicia. Aunque aún no se ha confirmado la operación, se estima que rondaría los 500 millones de dólares.

El Gobierno, por su parte, está en conversaciones con gobernadores opositores para acordar una ley base que cuente con aval legislativo. Esta ley tiene como objetivo desregular la economía y se busca firmar un pacto general para el 25 de mayo.

El Banco Central realizó compras cercanas a los USD 500 millones, aprovechando la alta negociación en el mercado mayorista. Esto contribuyó a un importante incremento en las reservas internacionales, que alcanzaron los 28.385 millones de dólares.

La cotización libre del dólar descendió a $1.000 para la venta, su nivel más bajo en varios meses. Esto se suma a la disminución en la brecha cambiaria y a otros indicadores económicos que muestran una tendencia positiva, como la caída de la inflación y el crecimiento de la recaudación fiscal en marzo.

En este contexto, Javier Milei ha expresado su interés en la dolarización y la eliminación del Banco Central, buscando implementar medidas ortodoxas para controlar el gasto fiscal y derrotar la inflación.