“Tengo un puñado de convicciones que no voy a dejar. No voy a ir hasta Jujuy para decirle a Morales que tiene que sumar a Milagro Sala. Hay que ser respetuoso de las jurisdicciones. No acepto este atropello”, lanzó Luis Juez, Senador cordobés y candidato a gobernador, contra Gerardo Morales, uno de los principales impulsores de la incorporación de Juan Schiaretti a Juntos por el Cambio.
Las últimas horas se han visto marcadas por un sinfín de idas y vueltas entre los líderes de la coalición. El motivo recae en el intento de incorporación del gobernador de Córdoba, peronista.
Mientras que el ala larretista-radical impulsa la ampliación de la alianza, el sector representado por Patricia Bullrich se opone y habla de una “falta de conocimiento del electorado” y de respeto faltando ocho días para el cierre de alianzas.
Para Luis Juez la cuestión es personal. El cordobés se candidatea a gobernador en una provincia dirigida por el propio Schiaretti. ¿Qué imagen dará a quienes pensaban votarlo si el líder del espacio político al que enfrenta en la provincia se suma a su misma coalición?
“No puedo explicarle a la gente (el electorado cordobés) que Schiaretti hoy es esto, y que mañana puede ser otra cosa, por conveniencia”, remarcó.
Y es que, además, el actual gobernador de Córdoba apadrina la candidatura del peronista Martín Llaryora, quien el próximo 25 de junio enfrentará a Luis Juez por el Ejecutivo provincial.
“Bronca y fastidio”, es lo que describe al ser consultado. “No me sirve que me digan que quieren que sea gobernador de Córdoba y después hagan todo lo contrario. No necesito que me palmeen la espalda”, sentenció.
La cuestión fue debatida ayer por la Mesa Nacional de Juntos por el Cambio, pero no se llegó a un acuerdo. La decisión fue postergada para una reunión, aún sin fecha pactada.
Fuente: El Economista.