Los últimos datos oficiales revelan un panorama desalentador: una caída significativa de la actividad económica en marzo y sombríos pronósticos para los meses siguientes. Según el INDEC, el EMAE registró una disminución del 8,4% interanual en marzo, con una contracción adicional respecto a febrero.

Aunque aún no hay datos oficiales sobre abril, las consultoras privadas indican un estancamiento virtual o una pequeña contracción respecto a marzo. La consultora Equilibra, dirigida por Martín Rapetti, estimó una caída del 0,5% en abril, sin incluir la producción agrícola, que ha mejorado en comparación con el año pasado debido a la sequía.

¿Qué está ocurriendo en mayo? Dos empresas líderes en el sector alimenticio, que influyen significativamente en los precios de los supermercados y mayoristas, coinciden en que lo peor ya ha pasado y que el consumo ha mostrado señales de reactivación en mayo. Aunque aún no tienen cifras definitivas, aseguran que las ventas han mejorado en comparación con abril y los primeros meses de 2024. “Medidas en volumen, las ventas registran una leve recuperación”, afirman desde una de las fábricas.

“La rentabilidad ha disminuido, con márgenes en mínimos, especialmente en alimentos básicos. Priorizamos las ventas para cubrir los costos fijos y mantener nuestra cuota de mercado”, añaden.

Sin embargo, los productos no esenciales aún no muestran signos de recuperación, reflejando la disminución del poder adquisitivo de los consumidores. A pesar de esto, el consumo de carne ha mejorado ligeramente, pasando de 39,9 kilos a 45 kilos por habitante al año en mayo, según Andrés Costamagna, consultor del mercado cárnico. Esta tendencia positiva se debe a la estabilidad de los precios de la carne en carnicerías y supermercados.

El presidente Javier Milei declaró en una entrevista con la revista Time que “ya estamos en la punta de la V corta”, indicando una mejora en la actividad económica. No obstante, empresarios del sector alimenticio prevén una recuperación más gradual. “Salimos del estado de shock”, comenta el director de una fábrica líder, pero advierte que la recuperación no será rápida ni fácil.

En cuanto al reciente aumento de los dólares financieros, los empresarios aseguran que no ha alterado sus planes inmediatos. Sin embargo, temen que una mayor brecha cambiaria pueda distorsionar la oferta de productos y generar presiones inflacionarias.

Por el momento, la recesión sigue dominando, pero las señales de una leve recuperación en mayo ofrecen un rayo de esperanza para el futuro económico del país.