En un escenario político tenso y en medio de una interna que podría definir su rumbo político, Patricia Bullrich ha logrado consolidarse como una figura poderosa, respaldada firmemente por el presidente y decidida a enfrentar el problema del narcotráfico en Santa Fe de manera extrema. Con el respaldo de fuerzas como Gendarmería, Prefectura, Policía de Seguridad Aeroportuaria y Policía Federal, equipadas con recursos adicionales gracias a un sobrefinanciamiento impulsado por Javier Milei, la situación promete ser intensa.
La confianza del Gobierno en Maxi Pullaro, en la gestión de la seguridad en la provincia, es mínima. Se avecina una acción oficial dura, comparable al enfoque del presidente de El Salvador, Nayib Bukele, según las creencias dentro del Gobierno. La posibilidad de intervenir la provincia no se descarta, especialmente después de eventos trágicos como la muerte de Nicolás Bussaniche, que ha exacerbado un problema arraigado desde la gestión de Néstor Kirchner y Aníbal Fernández en 2007.
Patricia Bullrich y Javier Milei han tomado una determinación clara, y su equipo de comunicación ya trabaja en una explicación para el crecimiento del narcotráfico durante el kirchnerismo. La inacción, falta de pericia, connivencia, convivencia o sociedad, aún no están claras como razones.
El caso de Marcelo “Coco” Medrano, asesinado hace tres años después de comprar dólares, desencadenó una investigación que señala a la financiera Cofyrco como una pieza clave en el lavado de dinero del narcotráfico. La complicación de la situación para Fernando Vercesi, Patricio Carey y Guido Garay, responsables de la financiera, ha llevado a su diversificación y se encuentran actualmente bajo escrutinio.
Siguiendo el modelo de El Salvador, donde se implementó un método para resolver el conflicto de violencia, el Gobierno argentino está llevando a cabo un operativo de inteligencia centrado en posibles lavadores de dinero vinculados al narcotráfico. Javier Milei, comprometido con su estilo, promete mantenerlo durante su gobierno, enfocándose no solo en el equilibrio fiscal, sino también en combatir el narcotráfico, que el Presidente considera como la raíz de los problemas en el país.