“Recemos para que en Navidad se produzca un alto el fuego en todos los frentes de guerra, en Ucrania, en Tierra Santa, en todo Oriente Medio y en todo el mundo”. Francisco recordó a la “maltrecha Ucrania“, que sigue siendo objeto de atentados en las ciudades, “que a veces dañan escuelas, hospitales e iglesias“.
Los ucranianos asistirán en febrero al tercer aniversario del comienzo de la guerra en su país. El Santo Padre también indicó que pensaba en Gaza y “en tanta crueldad, en el ametrallamiento de niños, en el bombardeo de escuelas y hospitales”.
El Papa Francisco criticó las acciones de Israel en la Franja de Gaza y señaló que su enviado no había podido entrar en el territorio debido a los bombardeos israelíes. El domingo, las autoridades israelíes permitieron al cardenal Pierbattista Pizzaballa, líder de la Iglesia católica en Tierra Santa, entrar en Gaza y celebrar una misa prenavideña con miembros de la pequeña comunidad cristiana de la zona.
Israel afirma que se ha esforzado por preservar a los civiles y que solamente está en guerra con el grupo islamista palestino Hamás, tras su incursión en Israel en el mes de octubre de 2023, en la que murieron unas 1.200 personas y otras 250 fueron tomadas como rehenes por militantes de la organización.
El Vaticano citó las bajas temperaturas exteriores y la agotadora semana que el Sumo Pontífice tiene por delante, para decidir que impartiera su bendición dominical en el interior de su residencia.
El Papa acaba de cumplir 88 años. Este martes, inaugurará su gran Año Santo y presidirá las celebraciones de Nochebuena y Navidad en la Basílica de San Pedro. El jueves tiene previsto viajar a la prisión principal de Roma para inaugurar allí el Jubileo.
El Santo Padre sufre desde hace tiempo de bronquitis, sobre todo en invierno. En 2023, fue hospitalizado y ahora recibe antibióticos por vía intravenosa. De joven le extirparon parte de un pulmón y con frecuencia se queda sin aliento, sobre todo después de caminar o hacer algunos esfuerzos.
