El Gobierno Navega por Aguas Agitadas: Desafíos en el Parlamento entre el Paro de la CGT y la Ley Ómnibus

En una semana intensa, el Gobierno nacional se vio dividido entre el paro general y la movilización de la CGT, y la ley ómnibus, que obtuvo un dictamen favorable en comisión con varios cambios con respecto al proyecto original. A pesar de que 34 de los 55 votos a favor del oficialismo fueron en disidencia, el Poder Ejecutivo advirtió que no planea realizar más modificaciones antes de su tratamiento en el recinto.

El ministro del Interior, Guillermo Francos, expresó su confianza en la aprobación de la llamada ley Bases, primero en la Cámara de Diputados y luego en el Senado. Sin embargo, reconoció que algunos “diputados y gobernadores” aún tienen reservas sobre ciertos puntos. Aunque no planean ofrecer nuevas modificaciones, Francos destacó que los acuerdos con los bloques reflejan la máxima cesión posible por parte del Gobierno, considerando la situación económica.

El principal punto de discordia es el tema de las retenciones, con varios gobernadores en contra. Francos afirmó que, aunque es un gravamen impopular, es necesario para equilibrar la economía. Ante la posibilidad de no modificar las retenciones, advirtió que se deberán realizar recortes en otros sectores.

A pesar de las disidencias, el Gobierno superó el primer obstáculo al obtener el dictamen de mayoría en el plenario de comisiones. Sin embargo, las negociaciones se estancaron, y la sesión programada para mañana se pospuso hasta la próxima semana. El oficialismo logró 55 firmas, pero 34 fueron en disidencia, incluso del propio PRO, evidenciando la necesidad de ajustes en el texto.

Francos considera que están cerca de aprobar la ley en la Cámara de Diputados, aunque reconoce que quedan temas por discutir en el recinto. Destacó el mérito del Gobierno al impulsar una ley que aborda temas cruciales de la economía con una posición legislativa minoritaria.

Sobre la gobernabilidad, el ministro señaló que el acuerdo se logra cuando el Congreso aprueba la ley, otorgando al Ejecutivo la capacidad de gobernar con ese marco normativo. También abordó la controversia en redes sociales entre el diputado Pichetto y el ministro de Economía Caputo, respaldando la postura de este último sobre la falta de recursos y la necesidad de recortes en caso de no aprobarse la ley.

En resumen, el Gobierno enfrenta desafíos significativos en el camino hacia la aprobación de la Ley Ómnibus, con tensiones en el parlamento y disidencias internas, mientras busca consolidar acuerdos para impulsar cambios económicos importantes.

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