El ministro de Economía, Luis Caputo, encabezará este jueves a las 11 una conferencia de prensa junto al vocero presidencial y legislador electo, Manuel Adorni, en la que anunciarán un nuevo esquema que permitirá el uso de dólares no declarados sin necesidad de justificar su origen. Según confirmaron fuentes oficiales a Ámbito, no se tratará de un blanqueo tradicional, sino de lo que definieron como “un cambio de régimen”.

La iniciativa buscará “remonetizar” la economía a través de la circulación de ahorros no declarados, que hasta ahora estaban inmovilizados por temor a sanciones o controles. “Va a poder usar los dólares sin dejar los dedos marcados”, resumió el presidente Javier Milei días atrás, en referencia a la menor intervención estatal sobre las operaciones en moneda extranjera.

Actualmente, los bancos están obligados a emitir un Reporte de Operación Sospechosa (ROS) si consideran que no está suficientemente documentado el origen de los fondos utilizados en una transacción. Con el nuevo esquema, ese cerco se aflojará: según explicaron desde el Gobierno, la meta es que “nadie tenga que dar explicaciones” por el uso de divisas.

Durante su exposición en la cumbre de AmCham 2025, Caputo explicó que la medida «no será un blanqueo» como los impulsados en 2024, sino el punto de partida de un nuevo modelo económico con menor intromisión estatal. “Lo que vamos a hacer es mucho más profundo. En la Argentina, el nivel de informalidad es altísimo, y eso se debe a dos causas: los impuestos y el exceso de regulaciones. Asumimos que el 99,99% de la población es delincuente, y no es así”, aseguró.

El titular del Palacio de Hacienda afirmó que el objetivo es “destrabar regulaciones” para “hacerle la vida más sencilla a los argentinos”. Criticó que el Estado haya convertido a bancos, inmobiliarias, escribanías y otras entidades en organismos de control fiscal: “La gente se harta. Una persona con muchísimos recursos transfirió $750.000 a su esposa y le pidieron justificación. Es un nivel de locura”.

Caputo enfatizó que este nuevo marco no afectará el cumplimiento de las normas del GAFI ni las funciones de la UIF, aunque algunos cambios requerirán aval legislativo. También cuestionó la eficacia del sistema actual: “Casi duplicamos los empleados en la AFIP, multiplicamos las regulaciones y sin embargo la informalidad creció. Hoy, mil CUITs representan el 50% de la recaudación. No funcionó”.

Según el ministro, el nuevo esquema apunta a ganar formalidad “no volviendo loca a la gente”, sino permitiendo que cada uno opere con libertad, dentro de un marco más simple y transparente.