El Gobierno realizó un movimiento de último momento para evitar que el Congreso rechace el veto presidencial de Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario, en medio de crecientes tensiones con los gremios universitarios. Este miércoles, la Cámara de Diputados debatirá la posibilidad de revocar el veto, y, a diferencia de la anterior votación sobre la Ley de Reforma Previsional, la oposición podría conseguir los votos necesarios para concretarlo.
La situación preocupa a la Casa Rosada, dado que, si la Cámara de Diputados rechaza el veto, el Senado podría tener un escenario aún más adverso para el oficialismo. Esto dejaría vigente una ley que institucionalizaría un financiamiento automático para las universidades públicas, lo que va en contra de los intentos de Milei por reducir el Estado y lograr superávit fiscal, incluso en áreas clave como la educación.
Jugada de último minuto
El martes por la noche, el Ministerio de Capital Humano, dirigido por Sandra Pettovello, emitió un comunicado a través de X (antes Twitter), anunciando que se actualizará la garantía salarial docente del sistema universitario con retroactividad a abril de 2024. Esto implica un aumento del 6,8% para los docentes, aunque este ya había sido rechazado por los gremios.
El comunicado detalló que “si un docente tiene dos cargos, percibirá el salario mínimo por cada uno de ellos”, y que también se extenderá este pago retroactivo al personal no docente. Este anuncio ocurre en vísperas de la sesión en Diputados y luego de que los sindicatos universitarios rechazaran la oferta inicial del Gobierno, exigiendo que los salarios mantengan el ritmo de la inflación.
Escenario conflictivo con los gremios
Los gremios universitarios recalcaron que no buscan solo un incremento salarial, sino una actualización que equipare los sueldos con la inflación para evitar la pérdida de poder adquisitivo. En este contexto, los líderes sindicales han insistido en que el salario universitario en dólares es uno de los más bajos de América Latina y en pesos es el peor desde el retorno de la democracia.
Tras la fallida negociación con el gobierno, los gremios instaron a los diputados a rechazar el veto de Milei, en sintonía con el clamor popular que se expresó en la Marcha Federal Universitaria realizada recientemente en contra del desfinanciamiento de las universidades y del veto presidencial.
Aumento impuesto por decreto
A pesar del rechazo sindical, el Gobierno impondrá el aumento del 6,8% por decreto, lo que lo convierte en el incremento acumulado más alto dentro del Estado Nacional para este mes. Pettovello también anunció un 5,8% adicional para el mes de octubre, buscando desactivar las tensiones, aunque esto no parece suficiente para calmar los reclamos del sector universitario.
La marcha federal y las críticas gremiales reflejan un creciente descontento no solo por el veto a la ley, sino por la situación salarial que atraviesan los docentes y no docentes universitarios. La sesión de este miércoles en Diputados podría ser un punto de inflexión para el gobierno de La Libertad Avanza, que enfrenta uno de los mayores desafíos en su gestión respecto al financiamiento educativo y las demandas gremiales.