La versión oficial sostiene que Luis Caputo regresó de Estados Unidos, revisó los últimos datos de recaudación, consultó con el Presidente y decidió anunciar una reducción temporal de las retenciones agropecuarias, cumpliendo así con una promesa de campaña y buscando aliviar la difícil situación del sector. En el Gobierno destacaron que trabajaban en el tema desde hacía meses, restando importancia a los reclamos de productores y gobernadores.
Sin embargo, en el ámbito agropecuario circuló una interpretación diferente, sobre todo después de la rápida transición del ministro, quien pasó en pocas horas de rechazar cualquier medida a anunciar un ajuste de políticas que pareció apresurado. A los productores les sorprendió que Caputo cediera a un reclamo del sector, cuando normalmente muestra resistencia, y que compartiera la noticia sin tener el decreto ni la instrumentación definida. Además, la coincidencia con la intervención de Javier Milei en Davos sembró sospechas sobre la urgencia de la medida.
Uno de los interlocutores de la escena comentó: “El Gobierno se mostró reticente a modificar las retenciones hasta principios de semana. Pero cuando Caputo volvió de Washington y se reunió con el FMI, propuso un anuncio a las tres de la tarde, y el decreto saldría el lunes. Lo que creemos es que la verdadera razón detrás de la medida fue asegurar divisas para la primera mitad del año.”
Durante las conversaciones con el sector, se mencionó la posibilidad de generar un puente económico hasta junio, ante la expectativa de que los desembolsos del Fondo Monetario Internacional podrían demorarse. Esta medida fue discutida con la misión técnica del FMI presente en el país.
El sector agropecuario, aunque en general optimista, tiene altas expectativas para liquidar lo que resta de la cosecha anterior, que incluye 10 millones de toneladas de soja y 3 millones de maíz. Esto podría generar entre 2.500 y 2.700 millones de dólares en ingresos fiscales. Queda por ver si también se avanzará con la cosecha 2025 o si los productores decidirán esperar hasta que finalice el plazo de la medida el 30 de junio, confiando en que el Gobierno no volverá a subir las retenciones.