La relación entre el kirchnerismo y el ex policía de la Federal, Ariel Pedro Zanchetta, trasciende el simple espionaje ilegal. Además, involucra la realización de operaciones periodísticas destinadas a desgastar a los candidatos opositores en municipios donde La Cámpora tenía postulantes propios, como Lanús y Hurlingham, donde finalmente obtuvo triunfos en las elecciones.
Zanchetta, un comisario retirado detenido por un extenso espionaje, se presentó como periodista al ser capturado en junio de este año. Según un informe de la fiscalía y la Dajudeco, estaba al mando del portal Enclave.ar, activo en internet, publicando notas mayormente favorables al kirchnerismo. La coordinación de estos informes periodísticos recaía en Fabián “Conu” Rodríguez, vocero de La Cámpora y subdirector en la AFIP.
Estas operaciones periodísticas, aunque no se pagaron específicamente por desgastar a los candidatos opositores en municipios estratégicos, formaron parte de un combo general que se sumó al capítulo central de la trama: el espionaje a Tolosa Paz.
El operativo desgaste fue evidente en Lanús y Hurlingham, donde La Cámpora logró victorias electorales significativas. Durante un año, Zanchetta publicó artículos en contra de los intendentes Grindetti y Zabaleta, en línea con el acuerdo cerrado con “Conu” Rodríguez. Este último, a través del Gobierno de la provincia de Buenos Aires, le giró 12 transferencias por un total de $1.980.000 por sus servicios periodísticos.
Los chats revelan cómo Rodríguez encargó a Zanchetta “partes” y notas contra Tolosa Paz, prometiendo pago con pauta oficial. Este intercambio detallado muestra la complejidad y la colaboración entre el espionaje, el periodismo y el respaldo financiero oficial en una trama entrelazada.