El dólar blue cayó el jueves por debajo de la barrera de $1.200, cerrando a $1.175, lo que representó una baja de $30 respecto al día anterior, poniendo fin a una racha alcista de ocho jornadas consecutivas. Analistas vincularon esta caída al “efecto contagio” de la intervención del Banco Central (BCRA) realizada el día previo, que logró frenar la subida de los dólares financieros, como el Contado con Liquidación (CCL) y el MEP. A pesar de esta corrección, los expertos advierten que la volatilidad podría persistir y el dólar informal podría superar nuevamente los $1.200 en los próximos días.
Se espera que el gobierno continúe utilizando su “artillería disponible” para intervenir y contener los dólares paralelos, frente a un escenario internacional desafiante, con la devaluación del real brasileño, la caída en el precio internacional de la soja y la expectativa de menores recortes de tasa de interés por parte de la Reserva Federal de EE. UU. Estos factores externos podrían ejercer presión sobre la estabilidad cambiaria local.
No obstante, la estrategia de intervención del BCRA tiene riesgos, ya que el país se encuentra en un contexto de reservas netas negativas. Según la consultora Outlier, las reservas netas del país eran negativas por más de u$s7.500 millones al 13 de diciembre.
En cuanto a la caída del dólar blue, el operador Gustavo Quintana de PR Cambios señaló que la baja se debió a la intervención oficial que moderó la subida de los dólares financieros. No obstante, Quintana advirtió que la cotización del dólar informal aún tiene margen para subir, debido a la mayor demanda por turismo y el cierre de posiciones al final del año.
El economista Federico Glustein opinó que la baja del dólar informal fue resultado de una intervención que utilizó reservas para reducir artificialmente el MEP, lo que también impactó en el blue. Glustein destacó que el dólar blue no ha alcanzado un techo definitivo y podría volver a superar los $1.200 cuando la intervención cesa.
El analista financiero Christian Buteler explicó que la caída del dólar blue es una corrección normal, tras haber subido considerablemente en los últimos días. En su opinión, el valor de $1.200 podría actuar como un techo temporal, pero la tendencia a largo plazo sigue siendo al alza, dado que la brecha cambiaria sigue siendo baja.
Por otro lado, el Gobierno sigue buscando mantener a raya a los dólares paralelos en un contexto de mayor demanda estacional por el cobro de aguinaldos y vacaciones. En este sentido, el BCRA intervino agresivamente el miércoles para moderar la subida de los dólares financieros, y según algunos operadores, se estima que la intervención alcanzó los u$s200 millones.
A pesar de una menor intervención en el mercado de bonos y dólares el jueves, el BCRA sigue utilizando esta herramienta para frenar la volatilidad cambiaria. Analistas como Damián Palais y Pablo Lazzati consideran que las intervenciones del BCRA están dirigidas a ponerle un freno a la rápida suba de los dólares paralelos, y aunque las intervenciones pueden ser eficaces a corto plazo, los riesgos de agotamiento de reservas y la falta de un plan estructural podrían poner en jaque la estrategia.
En cuanto a los factores externos que afectan la estabilidad cambiaria, la devaluación del real, la caída en el precio de la soja y las expectativas de la Reserva Federal de EE. UU. están creando un “cóctel peligroso”. Alejo Costa, de Max Capital, alertó sobre los riesgos de seguir con esta estrategia, que podría resultar en la pérdida de reservas sin un beneficio claro, ya que solo pospone el ajuste inevitable.
La volatilidad global y la situación económica interna plantean incertidumbre sobre el futuro del tipo de cambio. Según Costa, el gobierno podría seguir priorizando el control del tipo de cambio a corto plazo, pero a mediano plazo, las condiciones externas podrían obligar a una devaluación más pronunciada.
En resumen, el dólar blue experimentó una caída temporal, impulsada por las intervenciones del BCRA, pero los expertos coinciden en que la volatilidad cambiaría continuará, con factores tanto internos como externos influyendo en la cotización de la moneda.