La canciller argentina, Diana Mondino, reavivó las tensiones con China durante una entrevista explosiva concedida en Japón, país con el que la potencia asiática tiene una historia marcada por conflictos geopolíticos. En sus declaraciones, Mondino señaló que el gobierno de Javier Milei reducirá el comercio con China únicamente a transacciones entre empresas privadas, desligándose de la intervención estatal en decisiones de compra y venta. Además, hizo hincapié en la importancia de no colaborar con países que no sean democracias liberales, marcando un fuerte sesgo anti-chino.
La elección de Mondino de incluir en su gira asiática a Malasia y Vietnam, ambos con regímenes políticos distintos a la democracia liberal, evidencia su postura crítica hacia China. Esta confrontación adquiere mayor relevancia al realizarse desde Japón, histórico rival de China en la región asiática, con dos guerras pasadas entre ambas naciones.
Japón, aliado principal de Estados Unidos junto con Corea del Sur, ha sido utilizado por la Casa Blanca como parte de un despliegue militar para contrarrestar la influencia china en la región. Este contexto de rivalidad geopolítica entre China y Japón agrega una capa adicional de tensión a las declaraciones de Mondino.
El aumento de la tensión con China tuvo otro episodio reciente cuando la Embajada china en Buenos Aires cuestionó al vocero presidencial Manuel Adorni por difundir información falsa sobre una donación china a Argentina. Además, Mondino defendió la decisión del gobierno de abandonar los BRICS, mostrando escepticismo hacia la idea del “Sur Global” promovida por otros líderes regionales como India y Brasil.
Los vaivenes en la relación entre Argentina y China, desde las reuniones con representantes de Taiwán hasta las declaraciones sobre la soberanía de Taiwán, han generado tensiones y amenazas por parte de China, afectando incluso la relación comercial entre ambos países. La situación ha llevado a Mondino a un lugar incómodo dentro del gabinete y ha generado desconfianza en las relaciones bilaterales.