La denuncia presentada por el presidente Alberto Fernández contra Javier Milei, acusándolo de ser responsable de la reciente disparada del dólar blue, ha generado una serie de repercusiones en el ámbito político. Esta acción ha proporcionado a Milei una plataforma para expresar sus opiniones y críticas contra el Gobierno, al tiempo que le ha permitido presentarse como víctima, alegando un intento de proscripción.
Milei, acompañado por el candidato a jefe de Gobierno porteño, Ramiro Marra, convocó una conferencia de prensa en las oficinas centrales de Bull Market, un lugar simbólico relacionado con la familia Marra y las entidades bancarias. A través de esta acción, Alberto Fernández parece haber unido a dos figuras que anteriormente estaban distantes en el ámbito político.
La denuncia se basa en la acusación de “intimidación pública” y ha llevado a Milei a lanzar críticas a distintos actores políticos, incluido el propio presidente, así como al espacio de Juntos por el Cambio. Milei enfatizó los problemas económicos que enfrenta el país y se preguntó si él era el responsable del déficit fiscal, la emisión monetaria y otras medidas económicas gubernamentales.
La denuncia de Fernández se suma a la de Patricia Bullrich, y Milei ha utilizado la judicialización para arremeter contra diversos actores políticos. Además, apuntó a que la CGT también ha pedido abiertamente su detención y acusó a Juntos por el Cambio de ser cómplice de estos ataques.
En resumen, la denuncia de Fernández contra Milei ha desencadenado una batalla política y ha permitido a Milei expresar sus críticas y presentarse como víctima en medio de la tensión económica y política en Argentina.
