Durante la inauguración del Gasoducto Néstor Kirchner, Cristina Fernández de Kirchner dejó en claro su apoyo a Sergio Massa como su candidato, despejando las dudas sobre quién respaldaba en las elecciones. Mientras elogiaba la labor de Massa, ignoraba la presencia de Alberto Fernández, quien estaba sentado entre ellos. El acto sirvió como una muestra de unidad del peronismo y destacó la importancia de la obra como caballito de batalla en la campaña.
Cristina elogió a Massa por su compromiso y valentía, reconociendo su papel en el gasoducto y en su gestión como ministro. Aunque evitó confrontar directamente a Alberto, tampoco le dio crédito por la obra más importante de su mandato. Alberto, por su parte, se vio obligado a elogiarse a sí mismo y recordó su enfrentamiento con Clarín sobre la construcción del gasoducto.
En el evento, se notó el vacío hacia Alberto, mientras Cristina también destacaba la labor de Carlos Zannini en la liberación de fondos para financiar la obra. Máximo Kirchner, por su parte, ignoró a Alberto y vinculó el gasoducto de Vaca Muerta con la expropiación de YPF. Sergio Massa reivindicó la recuperación de YPF en 2012 y destacó la decisión de Alberto de seguir adelante con el gasoducto a pesar de las preocupaciones fiscales del FMI.
En general, el evento dejó en claro el respaldo de Cristina a Massa como su candidato, poniendo de lado a Alberto Fernández y destacando la importancia de la obra como símbolo del peronismo.