El presidente del Parlamento de Cataluña, Josep Rull, ha comenzado este martes la ronda de consultas con los líderes de los grupos parlamentarios para comunicarles que el candidato del Partido Socialista de Cataluña (PSC), Salvador Illa, ha reunido los apoyos para ser investido presidente de la región.
La formación de Illa fue la fuerza más votada en las elecciones celebradas el pasado 12 de mayo y, tras un acto de investidura fallida y 40 días de negociaciones, ha conseguido sumar el apoyo de los 20 de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y los 6 de los Comunes, además de sus 42 diputados, lo que le asegura los 68 respaldos para alcanzar la mayoría absoluta en una Cámara compuesta por 135 escaños.
La Diputación permanente se reunirá este miércoles para convocar la sesión de investidura el jueves, según ha anunciado este lunes Rull. Se trata de una sesión que puede quedar en el aire por la posible asistencia del expresidente catalán Carles Puigdemont.
Puigdemont anunció hace meses su intención de asistir a la cita en la que se debatirá la investidura del líder del PSC, contando con que ya estaría amparado por la ley de amnistía aprobada por el Congreso de los Diputados de España a finales del mes de mayo y que entró en vigor un par de semanas después.
Sin embargo, la interpretación de la justicia está siendo problemática, toda vez que el Tribunal Supremo considera que el delito de malversación, del que se acusa al expresidente catalán, no está incluido en la norma. Por lo tanto, se mantiene en vigor la orden nacional de detención y captura contra Puigdemont.
En este escenario, existe la posibilidad de que se produzca la detención de Puigdemont, si éste regresa a España para asistir al pleno de este jueves. En este supuesto, Rull podría decretar la suspensión del pleno, a petición de Junts per Catalunya, el partido del expresidente catalán.
El plazo para investir a un presidente de la región termina el próximo 26 de agosto, cuando la normativa forzaría la repetición electoral. Tanto desde el PSC como desde ERC se da por descontado que la investidura se producirá durante la primera quincena de este mes, aunque se suspenda el debate esta semana.
La financiación catalana como centro del acuerdo
Illa, que contaba con el apoyo de los Comunes desde que se conocieron los resultados electorales, consiguió recabar la semana pasada el apoyo de ERC, tras alcanzar un acuerdo en el que no se recoge el referéndum de autodeterminación reclamado por los independentistas y que pivota sobre una financiación singular para Cataluña.
Puigdemont volverá a España pese al riesgo de ser detenido
Así, se aspira a que Cataluña recaude y liquide todos los impuestos en su territorio, una propuesta que, si bien contempla la solidaridad interterritorial, ha levantado las sospechas en el resto de las regiones.
El punto de conflicto es que las regiones defienden que los territorios más ricos, entre los que se encuentra Cataluña, sean los que más contribuyen a la cartera común.
Las juventudes de ERC, que cuentan con un diputado, han dado finalmente su visto bueno al pacto, pero sosteniendo que se trata de respaldo crítico que puede condicionar toda la legislatura, en caso de que no se cumpla el acuerdo.
