Este jueves se vieron caídas muy fuertes en los bonos argentinos (principalmente los CER), en lo que fue la ratificación de una tendencia negativa que se venía dando desde el miércoles. El “efecto contagio” se trasladó a otros títulos públicos en pesos y a las LEDES, que operaron casi todos a la baja. Tal es así, que el Banco Central (BCRA) tuvo que salir a comprar deuda indexada para ponerle un alto a la caída de precios. En este contexto de alta tensión, la gran duda por estas horas es ¿qué consecuencias puede tener el derrumbe de los títulos en el mercado del dólar?
En un breve repaso de lo sucedido, el economista Christian Buteler recuerda en diálogo con iProfesional que los bonos atados a la inflación venían subiendo por arriba de ese índice, pero que “en las últimas semanas, empezó a haber más salidas que colocaciones”. Para él, esto se debe a que la indexación de precios de la economía está mermando y estos instrumentos ya no rinden más al 6,7% mensual, como en marzo. Si bien sigue siendo alta, la expectativa es que la inflación tenderá a la baja, lo que reduce el flujo de esos bonos.
Asimismo, otros analistas explican que esta situación se debió a una serie de rumores que circularon en la City respecto de un posible “reperfilamiento” de la deuda, aunque el motivo más probable sería el proceso de desarme de estos instrumentos que comenzó hace algunas semanas, ya que en los últimos 30 días más de $30.000 millones se fueron de los bonos.
Lo bonos argentinos sufrieron fuertes caídas poco antes de la próxima licitación de deuda del Tesoro.
Derrumbe de bonos CER: las razones
“Los títulos ya venían mostrando una caída desde hace unos días, pero la demanda se corrió por completo el miércoles y siguió el jueves”, señala el economista Guido Lorenzo, director de la consultora Labour Capital and Growth (LCG).
Según su opinión, no existió un detonante para este comportamiento, aunque menciona que, por un lado, puede estar relacionado a que los últimos datos fiscales se leyeron como una mala señal. También apunta que puede haber existido algún trascendido de reperfilamiento o un movimiento en el mercado de algún organismo que debió dar espacio en su cartera.
Ignacio Zorzoli, director de Finanzas del Centro de Estudios Económicos Argentina XXI (CEEAXXI), apunta que “la caída de los bonos en CER comenzó en mayo de este año y se fue agravando en junio, principalmente impulsada por el desprendimiento de este tipo de activos por parte de los principales fondos comunes de inversión (FCI) del país”.
Así, en el mercado enumeran que los posibles motivos de la caída abrupta de los bonos CER serían la salida de flujos netos de FCIs y una toma de ganancias de esos instrumentos tras un primer trimestre de rendimientos excepcionales relacionada a una mayor necesidad de liquidez para el pago de Bienes Personales, Ingresos Brutos y pago de aguinaldos.
Bonos en caída: BCRA, reservas e intervención
También mencionan como un elemento influyente para el desplome de los bonos la dificultad para la acumulación de reservas que viene mostrando el BCRA, que lleva a una perspectiva de mayores restricciones futuras en el acceso al dólar y faltantes de algunos productos (elemento que llevaría a un adelantamiento de órdenes de compra).
Pero, además, señalan que la venta de posiciones estaría relacionada a que muchos inversores tomaron ganancias en busca de pesos para ingresar a la licitación de deuda que realizará el Tesoro el martes 14 de junio, cuando deberá convalidar tasas más altas respecto de las que venía pagando hasta ahora.
Por su parte, el economista Javier Marcus opina que lo que sucedió se debe a “el Tesoro sobreestimó el apetito por deuda larga y el mercado le mostró que quiere deuda corta”. Opina que eso, sumado a los rumores de reperfilamiento que lanzó un sector del PRO (miembro de la alianza opositora al Gobierno), generó una dinámica bajista
Lorenzo critica, por otro lado, el proceder del BCRA y de la Agencia Nacional de Seguridad Social (ANSES), “que podrían haber salido a sostener la curva a tan pocos días de la licitación de junio”. Y es que, si bien fuentes cercanas al BCRA informaron que la entidad salió, desde la primera hora, a sostener los precios, el economista considera que “lo deberían haber hecho hace días”.
Dólar: cómo impacta la caída de los bonos
Pero, más allá de los motivos que hicieron caer los bonos, tal como se señaló antes, una gran incógnita en el mercado y entre los ahorristas es ¿cómo puede impactar esta caída en los bonos en el mercado del dólar?
El economista de Ecolatina, Juan Pablo Albornoz, no descarta que parte de esa liquidez que genera el desarme de bonos se vaya al dólar en algún momento. Y, aunque el proceso viene hace varias semanas, explica que es muy probable que el mercado de la moneda estadounidense responda con un poco de rezago por las trabas que rigen sobre él (como el parking, en el caso de los financieros).
Zorzolli anticipa al respecto que, en los próximos días, “todo este dinero líquido que estaba en los bonos y que salió de ellos ahora puede tener consecuencias en el tipo de cambio, ya que, teniendo en cuenta el ritmo de la inflación y la estabilidad del precio del dólar en el en los últimos meses, sería lógico pensar que, a menos que el BCRA salga a intervenir el mercado subiendo la tasa de interés, gran parte de ese monto terminaría yendo al dólar”.
En tanto, para Marcus “no debería haber un gran impacto porque el mercado está regulado y encepado“. En consecuencia, señala que hace rato que la revaluación del peso contra el dólar viene sorprendiendo al mercado
Dólar financiero: principal destino
El mercado financiero del dólar sí podría verse sacudido por el ingreso de los fondos que escaparon de los bonos. Y, en consecuencia, Zorzoli advierte que eso se vería reflejado, principalmente, en una suba del tipo de cambio del Contado Con Liquidación (CCL), “que podría tranquilamente superar los máximos alcanzados este año“.
Aunque, tal como menciona Lorenzo, hay que recordar que la compra de divisas por CCL limita el acceso al mercado formal de cambios y explica que “eso inhibe a las empresas a retirar los fondos”, por lo que prevé que es esperable que se dé una mayor acumulación de stocks en el lado real mientras algo más de dinero irá a los fondos money-market.
Fuente: Profecional, Argentina.