La Fuerza Aérea Brasileña (FAB) derribó una aeronave que ingresó ilegalmente al espacio aéreo de Brasil desde Venezuela, transportando un cargamento de drogas. El operativo, llevado a cabo el martes 11 de febrero como parte de la Operación Ostium, forma parte de una iniciativa de vigilancia aérea para combatir el narcotráfico en la frontera.
Según un comunicado de la FAB, la aeronave fue detectada en un vuelo irregular, activando de inmediato los protocolos de seguridad. “Siguiendo la legislación vigente, se aplicaron las medidas de averiguación para determinar o confirmar la identidad de la aeronave”, informó la entidad. Tras la identificación inicial, la FAB ejecutó medidas de intervención, incluyendo órdenes para modificar la ruta y aterrizar en una pista designada.
Sin embargo, los tripulantes desobedecieron las instrucciones, lo que llevó a la emisión de disparos de advertencia. Al no acatar las órdenes, la aeronave fue declarada hostil y sometida a Tiro de Detención (TDE), una maniobra de disparos precisos para evitar que el avión continuara su trayectoria. La FAB enfatizó que esta medida extrema solo se aplica cuando el piloto desobedece todas las instrucciones de aterrizaje y sigue volando en violación de las normas de seguridad aérea brasileñas.
Hallazgo de Cuerpos y Drogas en la Aeronave
El miércoles, un helicóptero H-60 Black Hawk del Séptimo Esquadrón del Octavo Grupo de Aviación fue desplegado para localizar los restos del avión y verificar su carga. Durante la inspección, realizada con el apoyo de agentes de la Policía Federal (PF), se encontraron los cuerpos de dos ocupantes y una cantidad de drogas cuyo peso y tipo no fueron especificados por las autoridades.
Aunque la FAB no reveló el modelo exacto del avión ni el punto preciso de la intercepción, se destacó que este operativo es parte de los esfuerzos de Brasil por frenar el tráfico de drogas en su frontera con Venezuela. En los últimos años, Brasil ha intensificado la vigilancia de su espacio aéreo para evitar el ingreso de aeronaves sospechosas de transportar drogas y otros productos ilícitos desde países vecinos.
Operación Ostium y Estrategia de Seguridad Fronteriza
La Operación Ostium, bajo la cual se realizó esta acción, tiene como objetivo reforzar el control en zonas de frontera y disuadir el uso de aeronaves para actividades criminales. “La FAB se mantiene siempre lista y presente en todas las operaciones realizadas, cumpliendo su misión institucional de mantener la soberanía del espacio aéreo, con vistas a la defensa de la patria”, concluyó la Fuerza Aérea en su comunicado.
Este tipo de operativos han llevado en el pasado a la intercepción y destrucción de varias aeronaves sospechosas en la región, gracias a la colaboración entre las fuerzas armadas y la policía federal para combatir el tráfico ilícito.
Preparativos para la Operación Atlas
En paralelo, las Fuerzas Armadas de Brasil se preparan para llevar a cabo el mayor ejercicio militar previsto para 2025, denominado Operación Atlas, que se realizará en el primer semestre del año cerca de la frontera con Venezuela. Este ejercicio, que durará dos semanas, involucrará el despliegue de un gran contingente de vehículos militares y aproximadamente 8.000 efectivos.
La Operación Atlas coincide con la celebración de la COP30 en Belém, capital del estado brasileño de Pará, y busca reforzar la seguridad en la frontera norte del país ante la creciente incertidumbre en la región. Aunque el presidente venezolano Nicolás Maduro ha suavizado su retórica sobre la disputa territorial del Esequibo, la estabilidad en la región sigue siendo incierta.
Este contexto de tensión y vigilancia reforzada resalta la importancia de las operaciones de seguridad aérea y militar de Brasil para proteger sus fronteras y mantener la estabilidad en el norte de América del Sur.
