Una nueva controversia sacude a la administración de Alberto Fernández y Cristina Kirchner. Documentos internos, facturas y correos electrónicos —que forman parte de una investigación sumarial— revelan que Casa de Moneda pagó hasta un 450% más caro a empresas privadas para importar billetes, tintas y otros insumos desde Malta, Francia y Brasil, ignorando opciones locales y extranjeras más económicas.
A esta situación se suma otra decisión polémica: en muchas de esas operaciones internacionales se contrataron pólizas de seguro adicionales a las de Nación Seguros, única compañía autorizada por normativa para cubrir las aseguranzas de las empresas públicas. Esto provocó un doble perjuicio para Casa de Moneda: un gasto innecesario que también derivó en incumplimientos contractuales y demandas judiciales.
La investigación judicial, iniciada tras una denuncia presentada por funcionarios del gobierno saliente pocos días antes de la asunción de Javier Milei, se basa en documentación fechada el 30 de noviembre de 2023. Según los registros, el gobierno de Alberto Fernández, al rechazar la emisión de billetes de mayor denominación para no validar la inflación, perdió la capacidad de producción local y debió recurrir a importaciones aéreas desde el exterior.
En medio de la crisis interna del oficialismo, Sergio Massa designó a Ángel Mario Elettore como presidente de Casa de Moneda en enero de 2023, en reemplazo de Rodolfo Gabrielli, para revertir el déficit. Elettore, con experiencia en la función pública cordobesa, descubrió irregularidades financieras y pidió una auditoría exhaustiva que puso en evidencia contrataciones sospechosas con tres empresas —Oceanic Business, Megafreight SRL y Megafreight USA—, sin registro formal como proveedores ni evaluación financiera.
Entre las irregularidades más llamativas están las facturas con numeración consecutiva y los precios inflados, sin licitaciones públicas ni transparencia, confirmadas por cotizaciones enviadas y autorizadas por correo electrónico sin aval del directorio. Por ejemplo, el costo del traslado aéreo desde Malta a Buenos Aires superó en 425.000 dólares el valor de mercado, y el flete desde Brasil se pagó hasta un 451% más caro que el precio real.
Además, pese a que Casa de Moneda ya contaba con pólizas de Nación Seguros para el transporte internacional, se contrató un seguro adicional con un costo extra de 24,24 millones de pesos entre 2022 y 2023, sumando sospechas sobre la gestión previa.
Tras la llegada de Elettore, las operaciones comenzaron a regularizarse y se firmaron contratos más económicos con Aerolíneas Argentinas, además de optar por envíos marítimos para abaratar costos.
El informe de auditoría concluyó que existían “posibles irregularidades” en las operaciones internacionales y recomendó iniciar acciones penales, denuncia que fue formalizada días antes del cambio presidencial y que actualmente investiga el Juzgado Federal 3, a cargo de Daniel Rafecas.
Mientras tanto, Casa de Moneda, afectada por un déficit creciente, dejó de fabricar billetes en octubre de 2023 y enfrenta un incierto futuro, con el Gobierno contemplando su cierre tras casi 150 años de historia desde su creación en 1875 durante la presidencia de Nicolás Avellaneda.
