Alemania se despierta este miércoles con la detención de 25 miembros de un grupo terrorista de extrema derecha que preparaban la toma del Bundestag y un golpe de Estado. La redada, de madrugada, ha tenido lugar en 11 regiones del país. Según confirman fuentes de la investigación, también se han producido detenciones en Italia y Austria.
Según una nota de la Fiscalía, los sospechosos pertenecen a una organización fundada en noviembre de 2021 “que se ha fijado el objetivo de acabar con el orden estatal y sustituirlo por su propia forma de Estado, cuyas grandes líneas han sido elaboradas”.
“Los miembros de la organización son conscientes de que este plan sólo puede realizarse mediante el uso de medios militares y la violencia contra representantes del Estado”, lo que incluye muertes, que aceptan como “paso intermedio para lograr el ‘cambio del sistema a todos los niveles'”, informa la Fiscalía.
A los acusados les une “un profundo rechazo a las instituciones del Estado y al orden liberal democrático” que con el tiempo les ha llevado a tomar la decisión de “participar en su eliminación violenta” y a comenzar para ello con preparativos concretos.
En relación al operativo, la formación ultraderechista alemana, Alternativa para Alemania, ha emitido un comunicado criticando lo que a su entender es una “desproporcionada” macrooperación. “Anteayer, una escolar fue víctima de un ataque con cuchillo por parte de un refugiado. Hoy, la policía se abalanza sobre presuntos ‘Reichsbürger‘ (Ciudadanos del Reich)”, informa Efe. “Se desplegaron nada más y nada menos que 3.000 agentes de policía para detener a 25 presuntos subversivos. Me pregunto por qué no se despliegan tales capacidades en los centros de acogida de refugiados”, agregó.
Agentes llevan a cabo un registro en Berlín tras la detención de extremistas. Christian Mang Reuters
El complot preveía que un antiguo miembro de una familia real alemana, identificado como Heinrich XIII PR, como líder de un futuro Estado, mientras que otro sospechoso, Ruediger vP, sería el jefe del brazo militar, dijo la fiscalía.
Heinrich, que usa el título de príncipe y procede de la Casa Real de Reuss, había gobernado partes de Alemania oriental, se había puesto en contacto con representantes de Rusia. El grupo lo consideraba su contacto central para establecer su nuevo orden.
“Enemigos de la democracia”
En relación a las detenciones, el Gobierno alemán ha anunciado que responderá “con todo el peso de la ley” contra los ultraderechistas. “Las investigaciones permiten vislumbrar el abismo de una amenaza terrorista procedente del entorno de los Reichsbuerger. Son los enemigos de la democracia”, aseguró Nancy Faeser, ministra del Interior, en un comunicado.
Faeser anunció que presentaría en los próximos días un proyecto de ley que facilitará el cese de los funcionarios considerados “enemigos de la Constitución” y que se encuentran involucrados en el intento de golpe.
En este sentido, un soldado en activo y varios reservistas se encuentran entre los investigados, según declaró a Reuters un portavoz del servicio de inteligencia militar. El soldado es miembro de la fuerza de élite KSK de la Bundeswehr.
Los arrestados creen mitos conspirativos consistente en narraciones de la llamada ideología de los Reichsbürger -movimiento ultraderechista que no reconoce la soberanía de la actual Alemania- y QAnon. El órgano central de la agrupación es un “consejo” y cuenta además con un “brazo militar”, al que corresponde la toma planeada del poder por la fuerza de las armas. Según la Fiscalía, algunos de los miembros de la organización desempañaron en el pasado un servicio activo en el ejército alemán.
