Luego de que la Cámara de Casación confirmara la condena de 6 años de prisión e inhabilitación perpetua para ocupar cargos públicos contra la vicepresidenta Cristina Kirchner, el exsecretario de Comercio Interior y actual líder del partido Principios y Valores, Guillermo Moreno, restó importancia al fallo y buscó desdramatizar la posibilidad de prisión para la expresidenta.
En declaraciones tras conocerse la decisión judicial, Moreno señaló: “Era innecesario, creo que hubo una lectura demasiado sectaria”, y apuntó que, en su opinión, “la Corte no suele tener fallos malintencionados”, dejando entrever su expectativa respecto a la futura apelación que presentará la defensa de Kirchner ante el Máximo Tribunal.
Sin embargo, lejos de mostrarse alarmado, Moreno adoptó un tono desafiante: “Supongamos que confirmen la sentencia; nos bombardearon, nos torturaron, nos asesinaron, nos hicieron desaparecer… ¿ir a la cárcel? Eso no nos asusta. Entrás cantando la marcha y salís cantando la marcha”, expresó, evocando la resistencia peronista de décadas pasadas.
El exfuncionario kirchnerista, quien también ha enfrentado la Justicia por causas vinculadas a la manipulación de estadísticas del INDEC durante su gestión, subrayó que, para él, la prisión no es más que un lugar de aburrimiento: “¿Qué les pasa, muchachos? Es la cárcel nomás, un sitio donde te aburrís y nada más que eso”, remató.
Las declaraciones de Moreno llegan en un contexto de fuerte polarización política, donde la condena a Cristina Kirchner ha reavivado las tensiones entre el oficialismo y la oposición. Mientras el kirchnerismo denuncia una persecución judicial y mediática, sectores críticos consideran que el fallo representa un avance en la lucha contra la corrupción.
Moreno, con su habitual retórica provocadora, busca posicionarse como defensor de la exmandataria y del peronismo más combativo, reivindicando la historia de resistencia del movimiento. Sin embargo, sus palabras también reflejan la incertidumbre que rodea el futuro político y judicial de Cristina Kirchner en un momento en que la política argentina se encuentra en un punto de inflexión.