La sanción de las leyes que el presidente Javier Milei considera esenciales y la firma de un pacto con los gobernadores marcarán el inicio de una nueva etapa en el Congreso. El PRO, coordinado por Mauricio Macri, planea distanciarse de La Libertad Avanza (LLA) y promover su propia agenda. Esta “guerra fría” se trasladará al ámbito electoral.

Para Milei, el desafío del PRO no debería ser una sorpresa. Karina Milei ha escuchado a los referentes del bloque, liderado por Cristian Ritondo, reclamar la inclusión de proyectos propios. El momento elegido para esta estrategia será justo después de la sanción de la ley ómnibus y la reforma fiscal, las herramientas que Milei necesita para gobernar.

Proyectos prioritarios del PRO

El PRO buscará impulsar proyectos como la “ficha limpia”, que prohíbe candidaturas de personas con condena por corrupción en segunda instancia, un tema liderado por Silvia Lospennato. Además, quieren acelerar la discusión de una reforma electoral para implementar la boleta única, actualmente bloqueada en el Senado.

Diferencias y coincidencias

Aunque hay puntos de coincidencia, como la baja de edad de imputabilidad, existen también divergencias, especialmente en política exterior. Macri prefiere relaciones con fuerzas tradicionales de la derecha, como el Partido Popular de España, mientras que Milei se alinea más con ultraderechas como Vox. Otra propuesta del PRO es habilitar el voto por correspondencia para residentes extranjeros, opción eliminada por Alberto Fernández.

Incumplimientos y postura republicana

El PRO también critica a Milei por incumplir contratos con generadoras eléctricas, una postura que defenderán como parte de su agenda republicana. Este posicionamiento es más simbólico que numérico en el Congreso, ya que no alcanzan el tercio necesario para sostener un eventual veto presidencial, pero sí influenciará el proceso electoral.

Perspectivas electorales y tensiones internas

Macri está dispuesto a discutir acuerdos con LLA, pero no a una fusión que elimine la identidad del PRO. La provincia de Buenos Aires será un reflejo de estas tensiones, con Karina Milei inscribiendo su partido y Ritondo asumiendo la presidencia del PRO en agosto. En el resto del país, las tensiones continuarán, como se vio en Chubut con Karina Milei y César Treffinger enfrentándose al gobernador Ignacio Torres (PRO).

El posicionamiento del PRO en esta nueva etapa será crucial para definir su papel y fortalecer su identidad en el contexto político argentino.